DE LA TELEVISIÓN: Colmena para rato

DE LA TELEVISIÓN: Colmena para rato
Fecha de publicación: 
18 Septiembre 2018
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No vamos a hablar mucho de la buena factura de La Comena TV, de su sentido de la espectacularidad, de la calidad indudable en casi todos los acápites técnicos, porque de eso se ha hablado en varias oportunidades. Solo diremos que esta temporada, y particularmente el programa final, fueron muy atractivos, reveladores del extraordinario talento y del crecimiento notable de los niños en concurso.

Asombra mucho la seguridad, la soltura, la sensibilidad artística, las capacidades de esos niños, que tienen que cubrir un amplio espectro: canto, danza, actuación… y al mismo tiempo, realizar otras actividades colaterales. También complace el nivel y la jovialidad de los conductores, y sobre todo, aplausos para la banda musical, que es excelente.

El programa del pasado domingo prodigó momentos muy emotivos, que seguramente conmovieron y divirtieron a la teleaudiencia. Muchos momentos, pero hay que destacar esa finísima e inspirada interpretación del célebre Drume negrita, de Eliseo Grenet, a cargo de dos niñas muy pequeñas y de un pianista de los grandes, Rolando Luna.

Generalmente no nos convencen los concursos infantiles, porque no queda claro hasta qué punto los niños están conscientes de la lógica, la ética y las implicaciones de la competencia; aunque en este caso todo parece indicar (al menos por lo que se ve) que aquí importó más el juego, la posibilidad de pasarlo bien cantando, bailando, actuando, aprendiendo, que obtener un trofeo. Los primeros lugares, por cierto, resultaron muy bien otorgados.

 
También hay que asumir mucho más el gran repertorio de la música para niños, concebida y muchas veces interpretada por los niños, que en Cuba tiene exponentes de gran valía. Hay temas que estos concursantes interpretaron que no estamos seguros de que alcancen a comprender.

El horario es otro tema polémico, aunque es un programa para toda la familia, no está ubicado en la franja ideal para los niños, de eso también se ha hablado, ojalá que para próximas temporadas se valoren otras opciones en ese sentido.

Otra sugerencia: ¿por qué no romper el esquema de los tres jurados (que en mi opinión lo hicieron muy bien) y añadir un cuarto que pueda opinar específicamente sobre la danza. Vendría muy bien un profesor o una profesora de esa especialidad. Y donde son tres pudieran ser cuatro, de cualquier forma aquí las decisiones se toman por consenso, no por suma de votos.

En definitiva, ha sido una buena temporada, pletórica de buenos momentos, instructiva y al mismo tiempo entretenida. La Colmena TV ha llegado para permanecer.

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