Mensajero de esperanza, Lula cumple 10 semanas como preso político

Impedido -según sus palabras- de recorrer el país que ama llevando el mensaje de esperanza en un Brasil mejor y más justo, el ex presidente Luiz Inácio Lula da Silva cumple hoy 10 semanas como preso político.

Un encierro que el propio ex dignatario calificó de injusto en un "Manifiesto al pueblo brasileño" dado a conocer el 8 de junio último cuando en la localidad de Contagem, Minas Gerais, fue lanzada nacionalmente su precandidatura presidencial por el Partido de los Trabajadores (PT).

Desde donde me encuentro, quiero renovar el mensaje de fe en Brasil y en nuestro pueblo, escribió Lula y recordó que "juntos supimos superar momentos difíciles, graves crisis económicas, políticas y sociales', y vencer el hambre, el desempleo, la recesión, las enormes presiones del capital internacional y de sus representantes en el país.

En el extenso documento el fundador y líder histórico del PT ratificó que su decisión de candidatearse responde a que los brasileños tienen el derecho de "votar libremente en un proyecto de país más solidario, más justo y soberano, perseverando en el proyecto de integración latinoamericana".

Soy candidato -remarcó- porque creo sinceramente que la Justicia Electoral mantendrá la coherencia con sus precedentes de jurisprudencia desde 2002, no doblegándose al chantaje de la excepción sólo para lesionar mi derecho y el derecho de los votantes a votar en quién mejor los representa.

"Quien tuvo el privilegio de ver a Brasil avanzar en beneficio de los más pobres, después de siglos de exclusión y abandono, no puede apartarse en el momento más difícil para nuestra gente", insistió el ex mandatario y reconoció que entre las muchas candidaturas de su trayectoria, "ésta es diferente: es el compromiso de mi vida".

Pese a su confinamiento desde el pasado 7 de abril en una celda de la Superintendencia de la Policía Federal (PF) en la ciudad paranaense de Curitiba, Lula se mantiene como candidato favorito de cara a las elecciones presidenciales de octubre próximo.

De acuerdo con la más reciente encuesta de intención de voto, realizada por el Instituto Datafolha y divulgada el lunes último, el ex presidente lidera la corrida presidencial con el respaldo de un 30 por ciento de los posibles votantes.

El propio sondeo reveló asimismo que más de un tercio de los electores se dicen sin opción al analizar posibles escenarios en los cuales el petista sea excluido del pareo.

En un comentario publicado ayer a propósito del lanzamiento de una iniciativa denominada Pacto por la Democracia, el columnista del diario digital Brasil 247 Paulo Moreira Leite alertó que no se puede hablar de lucha por la democracia sin colocar como prioridad la libertad de Lula y su derecho a disputar las elecciones presidenciales.

A menos que las palabras de ese compromiso sean puro blá-blá-blá, no hay como "reafirmar el diálogo" sin querer oir la voz ronca de Lula; ni se puede imaginar la posibilidad de profundizar la democracia, manteniendo en prisión, sin crimen demostrado, al más popular presidente de la historia de Brasil, subrayó.