Trump presionó a exdirector del FBI en busca de lealtad, dice reporte

En medio de hechos que por momento parecen sacados de una saga novelesca, el diario The New York Times reveló anoche que en enero pasado, pocos días después de su llegada a la Casa Blanca, el mandatario invitó a Comey a una cena.

La publicación citó a dos personas que escucharon al oficial relatar la historia, según las cuales los interlocutores conversaron sobre las elecciones y el número de participantes en los mítines a favor de Trump.

De acuerdo con esas fuentes, el jefe de Estado cambió entonces el rumbo del diálogo y le preguntó a Comey si le prometería lealtad.

El Times agregó que el interpelado declinó hacer esa promesa, y en su lugar le dijo al gobernante que siempre sería honesto con él, pero que no era 'confiable' en el sentido político convencional.

Tal desenlace, continuó el relato, aparentemente no satisfizo al presidente, quien más adelante en la cena volvió a decirle al invitado que necesitaba su lealtad, y recibió la misma respuesta.

Para el diario, lo sucedido ofrece una ventana al modo en que el mandatario asume la administración, y lo muestra como un hombre de negocios y una estrella de la televisión que nunca sirvió en una oficina pública.

Trump parece no entender que, por tradición, no se supone que los directores del FBI sean leales políticos, razón por la cual el Congreso, en los años 70 del pasado siglo, aprobó una ley que les da 10 años en el cargo para hacerlos independientes del presidente, agregó el Times.

Luego esas revelaciones, la secretaria de prensa adjunta de la Casa Blanca, Sarah Huckabee Sanders, negó que lo narrado por el periódico sea una descripción exacta de la cena.

A decir de la vocera, la integridad de las agencias policiales y su liderazgo es de suma importancia para el dignatario, quien "ni siquiera sugeriría la expectativa de lealtad personal, sólo lealtad a nuestro país y a su gran pueblo".

Durante una entrevista exclusiva emitida ayer por la cadena NBC, Trump se refirió a la conversación con Comey de un modo bastante diferente, pues según el mandatario el extitular le pidió mantener su trabajo.

El jefe de Estado aseguró que le preguntó al director si estaba bajo investigación como parte de las pesquisas sobre una presunta interferencia rusa en las elecciones de 2016, y que la respuesta del interpelado fue negativa.

Tal declaración fue de inmediato criticada por expertos legales y analistas, quienes señalaron como inadecuado que alguien posiblemente foco de una indagación sea informado sobre el tema por el jefe de la agencia federal encargada de conducirla.