Paralización y huelgas contra gobierno de Temer en casi todo Brasil

Acciones de diversos tipos se realizaron en 20 estados y el Distrito Federal, según indicó la Central Única de Trabajadores (CUT), una de las organizaciones participantes en la convocatoria.

El transporte público cruzó los brazos durante parte de la mañana, los trabajadores de limpieza urbana se mantuvieron en paro y frente al Conjunto Nacional de Brasilia colocaron cruces que simbolizaban la muerte de los derechos laborales, dijo la CUT.

La comunicación de la CUT refirió que en Maceió miles de manifestantes marcharon por el centro de la ciudad y bloquearon la calle del Sol, principal arteria comercial de la localidad.

Mientras, en Amapá ocuparon el Campus binacional de Oiapoque de la Universidad Federal. Lo mismo ocurrió en la Universidad Federal del Oeste do Pará y con el edificio administrativo de la petrolera estatal Petrobras en Salvador de Bahía.

La concentración popular en Fortaleza reunió a cerca de 20 mil personas, en tanto que en Pernambuco, el Metro y el servicio ferroviario pararon durante cuatro horas. Asimismo, más de cuatro mil profesores municipales acataron el paro.

En la empresa pública de ómnibus Carris, de Porto Alegre, la tropa de choque de la Policía Militar se encargó de garantizar la salida de los vehículos empleando spray de gas pimienta contra quienes intentaran mantenerse de brazos cruzados, informó la propia central sindical.

Organizadores de las protestas reiteraron en sus llamamientos que el propósito incluye repudiar la Propuesta de Enmienda Constitucional (PEC 55) remitida por Temer al Congreso para congelar a lo largo de 20 años las inversiones en los servicios públicos esenciales para la población.

También, contra las anunciadas reformas de la seguridad social y laboral; contra la entrega a las transnacionales de las mayores reservas de petróleo del país, localizadas en el área de pre-sal; y en apoyo a las tomas de centros educacionales que llevan adelante en toda la nación estudiantes secundarios y universitarios.

La agenda de los manifestantes incluyó además la exigencia de que el Estado retome su papel como inductor del desarrollo con distribución de las riquezas y la defensa de un Poder Judicial imparcial y sin vocación partidaria.

El Día Nacional de Paralización y Huelgas forma parte de un programa de acciones que, según el presidente de la CUT, Vagner Freitas, apuntan a la acumulación de fuerzas con miras a una huelga general que se producirá si los actuales gobernantes no entendieran que no pueden retirar los derechos a la clase trabajadora.