Cada 72 minutos muere un hondureño víctima de actos de violencia

La muerte de dos jóvenes universitarios consterna hoy a la sociedad de Honduras, donde según Naciones Unidas, ocurren 82 asesinatos por cada 100 mil habitantes.

Sentimientos de indignación y consternación embargan a la sociedad hondureña tras el asesinato de Rafael Alejandro Vargas, de 22 años, y Carlos David Pineda, de 23, indicó hoy el diario local El Heraldo en su edición digital.

Vargas era el hijo menor de la rectora de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), Julieta Castellanos.

De acuerdo con el periódico, estas promesas del país fueron víctimas el fin de semana de la imparable ola de violencia y criminalidad que acecha en el territorio nacional ante la vista y paciencia de los distintos operadores de seguridad y justicia.

Vargas cursaba la carrera de Sociología de la UNAH y Pineda Rodríguez era pasante del quinto año en la facultad de Ciencias Jurídicas y Sociales de la misma academia.

A más de 48 horas de la muerte de estos estudiantes, agentes policiales desconocen las pistas de los autores del suceso, denunció el rotativo.

El director de la Policía Nacional, el comisionado José Luis Muñoz, lamentó el asesinato del hijo de Castellanos, mientras prometió dar con el paradero de los criminales.

«Decir lo que sucedió en este momento sería especular, pero ya se manejan varias hipótesis», justificó Muñoz al cotidiano al adelantar que este caso podría tardar algún tiempo, pues los victimarios trataron de ocultar las evidencias y desvirtuar las escenas.

Los crímenes en el país solo tienen dos connotaciones: ajuste de cuentas o sin móviles, precisó la coordinadora del Observatorio de la Violencia de la UNAH, Migdonia Ayestas, tras lamentar el hecho.

A su juicio, la criminalidad en esta nación centroamericana aumenta sin que los órganos de justicia e investigación tengan resultados contundentes ante las muertes violentas acaecidas a diario.

Vargas y Pineda asistieron a un cumpleaños en la capitalina colonia Miraflores la noche del viernes último y los vieron por última vez pasada la medianoche madrugada, al salir de la casa donde se celebraba la fiesta.

La mañana del sábado pobladores de la localidad Villa Real, ubicada en el kilómetro ocho de la carretera que desde aquí conduce al sur de Honduras, informaron a la policía del hallazgo de dos hombres ejecutados en un barranco.

Días antes del homicidio, el Comisionado Nacional de los Derechos Humanos, Ramón Custodio, denunció que cada 72 minutos muere un hondureño víctima de actos de violencia.