Economía vietnamita en espiral: creció 7.02% en 2019

La cota de este año superó la meta fijada por la Asamblea Nacional (del 6.6 al 6.8 por ciento) y las previsiones más optimistas de bancos y organismos internacionales, ninguno de los cuales previó que el crecimiento de la economía de la nación indochina llegaría al 7%.

Entre otros factores, este resultado fue posible gracias a los desempeños de la producción industrial, las inversiones extranjeras (38 mil millones de dólares, la cifra más alta en una década), las exportaciones (unos 245 mil millones, superávit de casi 10 mil millones) y el turismo (más de 18 millones de visitantes extranjeros).

Fue posible, también, en medio de una ralentización de la economía global, las políticas proteccionistas al uso y el incierto panorama que dibuja en el sudeste asiático la guerra arancelaria entre Estados Unidos y China.

Vietnam, por demás, encaró durante buena parte del año una intensa sequía en gran parte del territorio y una devastadora epidemia de peste porcina africana que lo obligó a sacrificar unos seis millones de cerdos, más del 15% del rebaño nacional.

Otros factores adversos fueron la caída de los precios internacionales de algunos de sus productos clave, como el café y el arroz, y apreciables bajas de los embarques de mariscos y pescado a China y Estados Unidos debido a que estos endurecieron sus estándares de importación.

A mediados de noviembre, al aprobar los planes del país para 2020, la Asamblea Nacional fijó varios objetivos, entre ellos el de igualar o superar en ese año los resultados del 2019, lo que mantendría a la economía vietnamita como una de las más dinámicas y saludables de la región y del mundo.