De Lima a La Habana: Maylin y Silva con judoguis de clase dorada

Hay algo en la mirada de los judocas Maylin del Toro (63 kg) e Iván Silva (90) que denota ambición, sed de triunfo, pero también humildad y capacidad de análisis para no subestimar a ningún rival.

Ella llegó al Polideportivo III dispuesta a superar su bronce de Toronto 2015, el matancero Silva presto a sacudirse del revés sufrido ante el estadounidense Travis Stevens en la final de los 81.

Lo cierto es que ambos saciaron su sed de triunfo con un camino al título arrollador, capaces de resolver sus tres pleitos con categoría.

Maylin dejó en el tatami por ese orden a la colombiana Madeline Chaconta por ippón, le recetó wazari a la mexicana Prisca Awiti en semifinales, y por el oro desbancó con semejante técnica a la curtida venezolana Anriquelis Barrios.

Silva fue igual de autoritario. Inició con Wazari a costa del morocho Antony Peña, luego forzó el hansoku make (penalizaciones) al brasileño Rafael Macedo, y en la definición le propinó ippón al minuto y 35 segundos al cafetero Francisco Balanta.

A propósito, según el sitio especializado www.judoinside.com en lo que va de 2019 Maylin archiva positivos 17-6, en tanto Silva atesora 25-6, además de un 4-1 airoso ante Macedo.

A propósito de sus notorios rendimientos ambos judocas expresaron a CubaSí:

Maylin del Toro:

“Estuve segura en cada combate... Sin confianza pero lo mejor de todo es que tuve mucha fe. La táctica que trazamos el profe y yo en cada combate pudimos desarrollarla sin problemas. Las competencias siempre están duras pero vine con el propósito de mejorar el bronce de Toronto y lo logré”.

¿La técnica a la que le tuviste más confianza?  

“En verdad tuve mucha confianza en cada técnica que hice en los combates.  Pude marcar con una diferente en cada desafío.

Todas las contrarias son preocupantes, pero siempre digo que es mejor que se preocupen ellas por mí... Y salí a darlo todo en cada combate y a realizar mi táctica como la planificamos”.

Bien... ¿Qué queda por delante este año?

“Ahora el mundial en Tokio. Es importante tener un buen rendimiento allí. Hay que mantenerse en puestos de clasificación olímpica. Tokio es mi sueño y con 25 años quiero luchar por una medalla allí también”.

Y hasta este minuto al parecer podrá hacerlo, pues la discípula de Yordanis Arencibia recala en el décimo escaño tanto del ranking del orbe (3 460 ptos), y del olímpico (1 696).

Ivan Silva estuvo indetenible con su uchi-mata. Foto: José Meriño, enviado especial.

Iván Silva:

“Buenas noches y muchas gracias. Decir que nos preparamos muy bien para evitar percances. Creo que todos los que vinieron se prepararon bien pero supe imponerme.

Contra el brasileño Rafael Macedo, como en los últimos combates, no salió a dar pelea y busqué ganar mediante la táctica de los kumis, presionar al ataque en todo momento y hacerlo ver pasivo para que lo amonestaran. Funcionó a la perfección el plan”.

¿Técnica de mayor efectividad o confianza?

Sin dudas mi uchi-mata. Me sentí seguro y muy bien trabajando con él. Efectivo.

Ahora al mundial, ¿cierto? Y buscar puntos para el ranking de clasificación olímpica...

.“Sí, no paramos nada de vacaciones. Tratar de mantener la forma para Tokio”.

Y sí que está en estado de gracia Silva, pues el matancero, natural de Colón marcha cuarto en el listado del orbe (4 770 unidades), y segundo de cara a la cita bajo los cinco aros (2 855). Por si eso no bastara, acumuló seis podios en su andadura previa a esta cita multideportiva continental en 2019. Señal de que Silva, está preparado para encarar cualquier batalla.

Este sábado también subieron al tatami Onix Cortés (70 kg), y Jorge Martínez (81). Ambos fueron acreedores de las preseas de bronce, por lo que hasta este minuto, la disciplina ha conquistado preseas con casi la totalidad de sus representantes, por lo que acumula (3-1-5), únicamente aventajada por Brasil (4-1-2).

Eso antes de que este domingo asalten el tatami con grandes opciones Kaliema Antomarchi (78), Idalys Ortiz (+78), Liester Cardona (100), y Andy Granda (+100).

Pelotaris con la mano “equivocada” para el oro

Tenían la escena dibujada para que les sonriera la gloria, pero no les fue posible. Blandieron sus manos, lucharon,  y el cetro se les hizo esquivo a las cinco modalidades de la pelota vasca que se plantaron en finales.

Dariel Leiva obtuvo la quinta medalla de plata al ceder 0-2 ante el mexicano David Álvarez, esa era la última esperanza dorada de nuestros pelotaris.

Antes se había desvanecido el sueño de Yasmary de la C. Medina y Leyanis Castillo en el frontenis dobles femenino frontón, víctimas 2-0 (0-15, 5-15) de las mexicanas Guadalupe Hernández y Ariana Ceped.

Igual destino plateado sufrieron Medina y Daniela Darriba en dobles femeninos de pelota de goma frontón tras sucumbir 0-2 (4-15, 7-15) ante las también aztecas Dulce Figueroa-Laura Puentes, en la segunda de tres batallas doradas entre ambas naciones.

La tercera plateada fue al pecho de Wendy Durán en el Frontón Peruano, al ceder frente a la local  al perder en la porfía final con la local Claudia Suárez en sets corridos 15-4 y 15-14.

Seguirían sus pasos el binomio de pelota de cuero frontón masculino integrado por Armando Chappi-Frendy Fernández, superados 6-15 y 11-15 por los argentinos Pablo Fusto-Alfredo Villegas.

Entre varones, la actuación cubana la inició Alejandro González, bronce de la Pelota de goma Frontón al ganarle 2-0 (15-7, 15-7) al uruguayo Brian Ramírez.

Las espadistas cubanas demostraron estar a la par de la élite del continente con su plata de conjunto. Foto: Osvaldo Gutiérrez, enviado especial.

Espadistas empuñaron de plata

Las he visto sudar durante sesiones de entrenamiento en las pistas del Cerro Pelado. Buscar variantes de entrenamiento ya sea intercambiando touchés con sus homólogos varones, o buscando estocadas certeras con las preselecciones de pentatlón moderno. Dejan el alma y se quitan sus camisillas blancas empapadas en sudor.

Por eso la plata del elenco de espada femenino en el Centro de Convenciones de Lima cae en el plano de más que merecida. Es cierto, el marcador de la final 29-45 ante las estadounidenses denota superioridad por parte de las monarcas, con Katherine Holmes (31 del listado del orbe), Catherine Nixon (56), e Isis Wasington (77), todas con mucho mayor aval internacional y volumen de asaltos de primer nivel.

Diamelys González, debutante en este tipo de lides, expresó que se enfrentaron a una armada muy fuerte, pero que crecieron a medida que avanzó la competencia.

La de mejor efectividad al tocar fue la experimentada Yamirka Rodríguez. Su global de 12-13 así lo demuestra. La tercera espadista de la escuadra fue la zurda Seily Mendoza.

De conjunto lograron desbancar por ese orden 45-40 a las canadienses; y en semifinales 45-37 a las brasileñas.

Ese subtítulo sirvió al combinado antillano de esgrima para culminar con metal áureo, uno de plata y dos de bronce, rendimiento considerablemente superior al de hace cuatro años en Toronto, cuando solo se alcanzó un metal bronceado.

Ahora en tierras del Cuzco, los espadistas varones se vistieron de oro; quedando los bronces en poder del espadachín Yunior Reytor y el sablista Harold de la Caridad Rodríguez, en sus respectivos concursos individuales.