DE LAS REDES: Caravaggio 2019

Caravaggio, como otros tantos de los grandes de la pintura barroca, pintó bodegones: superficies de madera cubiertas de frutas, hojas, flores y cestas; recreaciones maravillosas de una naturaleza pródiga de formas y colores.

Hay quien desprecia las naturalezas muertas, aunque las haya pintado un genio. Creen que es arte menor, concebido para adornar comedores. Pero las combinaciones que prometen las frutas pueden saciar muchos apetitos estéticos.

En muchos de los bodegones de antaño uno adivina un espíritu superior, como si la mano que reuniera esos comestibles y sus recipientes fuera mano divina.

Esa idea de la divinidad parece cosa antigua. Pero hoy todavía se puede emular a los maestros creando conjuntos armoniosos, como los que concibió el estudio Quatre Caps en su serie Not Longer Life, para reinterpretar las obras que descollaron en el género.

Esta es una reinterpretación de un bodegón de Caravaggio. La broma es que quizás así lo hubiera concebido el artista si viviera por estos días. La trampa es el plástico.

Las uvas, las manzanas, las naranjas, los limones… aparecen aquí como se exhiben en los anaqueles de supermercados de todo el mundo.

Los creadores dicen que la serie surge como respuesta al volumen de plástico que se produce cada año, y la cantidad de tiempo que tardarán estos materiales en biodegradarse.

Una fruta no dura mucho sobre la tierra… el envase de plástico puede permanecer muchos siglos.

El imperio del continente sobre el contenido.

AQUÍ HAY MÁS BODEGONES REINTERPRETADOS: https://culturainquieta.com/es/arte/arte-digital/item/15588-seis-bodegones-clasicos-adaptados-a-los-tiempos-de-nuestra-sociedad-de-consumo.html