Hija de Elvis Presley a riesgo como el padre

Priscilla Presley está preocupada porque considera que su única hija, Lisa Marie, se enfrenta al mismo destino aterrador que Elvis y que podría tener una muerte temprana como consecuencia de la adicción a las drogas.

Lo reveló el sitio de noticias del espectáculo Radar online, según el cual Lisa Marie dijo que está "agradecida de estar viva hoy" después de hablar por primera vez sobre sus devastadoras adicciones.

Las historias acerca de las fiestas de Lisa Marie, en las que se consumen drogas y alcohol, dejaron a Priscilla atemorizada de que su hija de 51 años pueda recaer en cualquier momento en las adicciones y termine muriendo.

"La muerte de Elvis aún le perfora el corazón más de 40 años después, y hará todo lo que esté a su alcance para garantizar que la historia no vuelva a repetirse", aseguró una fuente cercana a la familia Presley.

Elvis fue encontrado muerto en un baño de su mansión en Graceland en agosto de 1977, después de años de alimentarse mal (exceso de comida chatarra) y el abuso de medicamentos recetados, que terminaron por provocarle un ataque al corazón.

Lisa Marie aseguró en su entorno familiar que sabe que la gente "se pregunta cómo, después de perder personas cercanas" ella también fue "víctima de los opioides".

Así lo reveló Harry Nelson, que escribió el libro "Los Estados Unidos de Opioides: una receta para liberar a una nación con dolor".
Según Nelson, la hija del Rey "solo tomó una receta de opioides" cuando se estaba recuperando de un parto.

"Priscilla se ha preocupado por Lisa Marie toda su vida", agregó la fuente. "Crecer en la familia más famosa de Estados Unidos significa que la gente ha estado tratando de extraviarla desde que era una niña".

"Ha estado cerca de rockeros, drogadictos y bichos raros durante décadas, pero solo cuando tenía 40 años comenzó a abusar de los medicamentos recetados y a beber demasiado, y eso hizo que Priscilla se enfermara", continuó el médico.

Según Radar OnLine, Lisa Marie vivió los años más salvajes entre 2015 y 2016, cuando vivía en Nashville y abusaba de las drogas todas las noches y se le pedía que saliera de los restaurantes después de beber alcohol en exceso.