Más de 300 mil niños mozambiqueños sin asistir a clases tras ciclón

Esto podría tener graves consecuencias en su educación, alertó el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (Unicef), que solicitó 122 millones de dólares a la comunidad internacional con el fin de apoyar la respuesta humanitaria en Mozambique, Zimbabwe y Malawi, los países más afectados por Idai.

Según esa agencia de la ONU, tres mil 400 aulas fueron dañadas o destruidas en Mozambique debido a ese fenómeno climático.

Por otro parte, algunos de los centros escolares requieren fuertes tareas de rehabilitación pues fueron usados como refugios temporales de emergencia para las personas desplazadas por la tormenta.

Unicef insta ahora a los socios humanitarios a trabajar en común con el fin de poner en marcha una serie de medidas como el establecimiento de lugares de aprendizaje temporales para que los menores regresen a la escuela lo antes posible.

La educación es esencial para ayudar a los niños a recuperar la sensación de normalidad después de un acontecimiento traumático como un ciclón, y es clave para su desarrollo a largo plazo, destacó Unicef citada por el sitio oficial de noticias de la ONU.

A esta situación se añade que las tasas de deserción escolar podrían aumentar si las familias, que perdieron sus bienes o medios de subsistencia, se vieran obligadas a enviar a sus hijos a trabajar, añadió el fondo para la Infancia.

Los maestros también fueron muy afectados por el paso del meteoro y la Unicef se propone apoyarlos financieramente a corto plazo para que puedan reconstruir sus vidas sin abandonar la enseñanza.