La hora de Frida Kahlo en EE.UU.

Frida Khalo entre moda, arte y vida: mientras en Nueva York comienza la Semana de la Moda, el Museo de Brooklyn apunta sus reflectores a una exhibición del muy personal modo de vestir y arreglarse de la artista mexicana, al tiempo que Boston también le dedicará otra muestra.

Apenas una decena de cuadros están incluidos desde hoy hasta el 12 de mayo en la muestra neoyorquina titulada "Las apariencias engañan", casi como objetos de acompañamiento de los vestidos Tehuana, las joyas mesoamericanas, los corsés y las prótesis pintados a mano y los esmaltes para uñas Revlon, además de las infaltables gafas de sol de Frida.

Se trata de 350 objetos traídos desde la casa de Ciudad de México donde fueron redescubiertos e inventariados en 2004, luego de permanecer bajo llave desde 1954, tras la muerte de su propietaria.

La exhibición lleva a Nueva York por primera vez los contenidos de la legendaria "Casa Azul", una ocasión para crear un puente entre Estados Unidos y México mientras en el Discurso sobre el Estado de la Nación el presidente Donald Trump insistió en la necesidad de un muro antiinmigrantes en la frontera en común. "Las apariencias engañan" remite al nombre de un dibujo de Kahlo que la muestra con un vestido transparente y, por debajo, todas las marcas y secuelas de las dolencias permanentes que sufrió tras el brutal incidente vial que le cambió la vida a partir de los 18 años de edad.

Otra muestra dedicada a Kahlo podrá verse desde fin de mes hasta junio próximo en el Boston Museum of Fine Arts que ofrecerá una reseña de la relación entre la obra de la multifacética creadora y el arte popular mexicano. Frida ya forma parte hoy en día de la cultura pop: con una Barbie dedicada a ella; con Beyoncé imitando su ropa en la fiesta de Halloween de 2014 y hasta con la primera ministra británica Theresa May, insospechada de simpatías comunistas como sí las tuvo la pintora, que en 2017 se puso un brazalete con sus retratos en medio del Congreso del Partido Conservador. Actualmente resulta difícil de imaginar que en vida Kahlo hubiera transitado detrás de bastidores, sin embargo, en 1938, para la primera exposición dedicada a ella en Nueva York, la revista Vogue prefirió llamarla "La Señora de Diego Rivera".

"Esta vez el foco está puesto en cómo política, identidad de género, vestimenta y discapacidad tuvieron un rol definitorio en la vida y la obra de la artista. La historia de Frida está narrada a través de sus efectos personales. Estamos felices de albergar en Nueva York el homenaje a una figura icónica e internacionalmente famosa", dijo Anna Pasternak, directora del Museo de Brooklyn.

Pasternak destacó la importancia de la iniciativa "en el particular momento histórico que estamos viviendo, cuando es absolutamente necesario construir puentes culturales entre Estados Unidos y México".

Y la vida surgiendo siempre como trasfondo del arte, en el caso de Frida con enfermedades, dolores, abortos y traiciones afectivas de Rivera.

Esperando una afluencia de público comparable a la muestra "David Bowie is", que marcó un récord de 275 mil boletos vendidos, el Museo de Brooklyn cobrará una suma por separado, de 20 a 25 dólares, según el día de la semana. Usualmente cerrado los lunes y martes, el museo para esta ocasión especial permanecerá abierto durante los siete días de la semana.