Poroshenko: Odio a Rusia

Tal como los nazis pretendieron exterminar al pueblo soviético, el presidente de Ucrania, Petro Poroshenko, sigue dando pasos en el mismo sentido para concitar el odio a Rusia, con nuevas acciones provocadoras para elevar la tensión entre ambas naciones y dar más argumento a la campaña de Occidente contra Moscú.

Esta vez ha vuelto a utilizar el regreso soberano de Crimea a la Federación Rusa para elevar aún más las provocaciones, esta vez utilizando tres barcos de guerra que violaron las aguas territoriales rusas en el Mar Negro, por lo cual fueron contenidos y atrapados por embarcaciones similares de Moscú, cuyo presidente, Vladimir Putin, afirmó que tal hecho fue organizada por las autoridades ucranianas actuales de cara a las elecciones presidenciales en Ucrania, previstas para marzo venidero.

En cuanto a fortalecer su pretensión a la reelección, Poroshenko decretó la ley marcial en todo el país, bajo el alegato de una probable invasión rusa, y trató de concitar el apoyo de la Organización del Tratado del Atlántico Norte a la provocadora acción militar ucraniana en el Mar Negro y el incremento por la Unión Europa de las injustificables sanciones contra Rusia.

El Presidente de Ucrania eludió responder a la afirmación de Moscú de que agentes de la seguridad se encontraban entre los tripulantes de los buques atrapados, lo cual era una señal de que tofo era una provocación preparada de antemano para utilizarla como excusa para declarar el estado de excepción.

Al mismo tiempo, declaraba que no le pagaría a Rusia los 3 000 millones de dólares que le adeuda y trató de negar las revelaciones de que estaba implicado en casos fraudulentos de ciertas empresas en el propio territorio ruso.

Por lo pronto, solo logró que el presidente norteamericano, Donald Trump, suspendiera su reunión con su colega ruso, Vladimir Putin, en el marco de la reunión del G-20 en Buenos Aires.

En el cumplimiento del deber

Putin, por su parte, defendió el uso de la fuerza por los guardacostas rusos, y aseguró que, si hubieran actuado de otra forma, habría que llevarlos a juicio. “Cumplieron su deber militar”, subrayó.

Medios occidentales de prensa admitieron que los barcos ucranianos ignoraron las demandas de los guardacostas rusos, al parecer porque no creyeron que fueran a defender la integridad territorial de la Federación.

El corresponsal de Reuters dio pábulo a la veracidad de la afirmación de Putin de que “no se sabía qué se proponían hacer. Mientras no respondían a las demandas de nuestros guardias fronterizos tomaron rumbo fijo hacia nuestro puente”, al parecer con el fin de organizar una provocación en el puente de Crimea inaugurado por el jefe del Kremlin en mayo pasado.

En este sentido, Moscú ha reiterado que las aguas territoriales donde los buques ucranianos cometieron la provocación siempre fueron rusas, incluso antes del referéndum donde más del 90% de la población de Crimea aceptó el regreso a la Federación.

Ahora, tras la provocadora maniobra ucraniana, Moscú anunció que desplegará más de sus nuevos sistemas de misiles antiaéreos S-400 a Crimea, convirtiéndola en una fortaleza.

Finalmente, Putin describió lo ocurrido de incidente fronterizo y negó que pueda hacerse un paralelismo con lo ocurrido en la península en marzo del 2014, cuando Crimea se integró a la Federación:

”Esa fue otra historia, más grande. Al igual que la terrible guerra civil en Ucrania... Y entonces no se introdujo ningún estado de excepción y ahora hay un pequeño incidente en el mar Negro y se declara”, apuntó.