Barranquilla 2018: Entre alegrías, despegue dorado y reflexiones

Los cubanos se encomendaron a la ciclista Arlenis Sierra, reina de la contrarreloj individual, y la taekwondoca Tamara Robles (53 kg).

Robles, de solo 17 años y natural de Sagua de Tánamo en Holguín, fue una verdadera mata gigantes. Primero hincó las rodillas de la mexicana y favorita Linda, para luego en la final remontar un 0-10 adverso del primer asalto e imponerse finalmente 21-16 a la panameña Carolina Cartens, quien entrena en Estados Unidos bajo la tutela de un técnico español.

Además vibré con cada ejecución en la plataforma de los pesistas Otto Félix Oñate (par de bronces con18 años en los 56 kg) y Lubia Montero (plata en el envión de los 48 kg), ambos debutantes y evidencia de que la cantera asciende con potencialidades, basado principalmente en la efectividad de sus ejecuciones pese a su inexperiencia competitiva, con únicamente un ejercicio fallido en cada caso.

Oñate analizó su arranque y reconoció haber cometido un error técnico, mientras en el envión llevó su marca personal hasta 145 kg. En cambio Lubia agradeció a dos de sus entrenadores desde la base a la actualidad: Alexander y Luis Ramón.

Lo cierto es que en la halterofilia, fundamentalmente en la masculina, pues las chicas iniciaron su práctica antes de la edición de Cartagena de Indias 2006, hemos cedido terreno. Justo ahí aflora la primera reflexión, pues colombianos y venezolanos se han convertido en potencias emergentes. De cualquier manera los performances de los nuestros hacen pensar en un resurgir a no muy largo plazo, a menos en este escenario centrocaribeño.

En la cuera de las preseas, la relación de agraciados se completó con el pedalista Pedro Portuondo en la contrarreloj masculina; el taekwondoca Miguel Ángel (63 kg); y el nadador de 19 abriles Luis Vega (200 mariposa), todos merecedores de metales bronceados.

Todos marcados por su estreno en este tipo de certamen multideportivo.
En el caso del tritón Vega (1:59.23 minutos) rebajando la los dos minutos para cumplir con el vaticinio de su entrenadora María Luisa Mojarrieta. Por cierto, el rey del evento, el anfitrión Jonathan Gómez (1:57.03) rebajó en más de un segundo la cota anterior.

También transitó por cauces acertados el relevo 4x100 metros combinado mixto, anclado en la cuarta plaza (3:58.69) en prueba dominada por los aztecas (3:49.61).

¿Nuevos aires del clavados?

Pese a no haber alcanzado preseas los clavadistas de la Mayor de las Antillas mostraron aires de calidad en las finales del trampolín a un metro. De la mano de José Antonio Guerra, pendiente al más mínimo detalle en cada ejecución de sus pupilos, los cuatro exponentes del patio en algún momento dieron fe de las virtudes que poseen.

Los más atinados resultaron ser Anisley García (248.85-4ta con 16 primaveras) y Carlos Escalona (358 y fracción-5to a sus 19 años). En cada caso los máximos honores recayeron en la anfitriona Diana Pineda (282.75-repitió su coona de hace cuatro años en Veracruz), y el Azteca Jahir Ocampo (414.45), en una lección magistral de ejecuciones y estabilidad este último, como así lo constató con su respetable acumulado.

Por Cuba Prisis Ruiz (228.40-5ta), y Angello Alcebo (320.50-7mo) completaron los performances.

De cal y de arena en los colectivos

Las miradas, aunque fuere de reojo, se volvieron hacia el béisbol. El escepticismo merodeaba a la novena de Carlos Martí, pero protagonizaron una blanqueada con autoridad 5-0 sobre México, de notoria importancia en el sistema de todos contra todos que rige el certamen.

Los nuestros conectaron 12 inatrapables, con Yordan Manduley y Yurisbel Gracial en rol de bujías. Desde la colina de los martirios se conjugaron los esfuerzos del tridente Lázaro Blanco, Alaín Sánchez y Vladimir García, para no permitir libertades a la batería de los cuates.

Lejos del recuerdo de las otrora Espectaculares Morenas del Caribe se comportaron las chicas del voleibol, quienes cometieron muchos errores no forzados ante sus rivales mexicanas, especialmente en el set de apertura y en el tie break. En definitiva no supieron reponerse, estabilizar un poco más su accionar y sucumbieron en el rompe corazones por abultado 8-15. Las aztecas se antojaban las contrarias más accesibles por lo que no creo que ese elenco, con el morral de la inexperiencia e inestabilidad lleno, pueda doblegar a República Dominicana y Puerto Rico, los principales candidatos a la corona en la justa.

Si la pelota, el baloncesto y el balonmano salieron por la puerta ancha, el Hockey no pudo materializar el triunfo. Las nuestras fueron blanqueadas por las mexicanas 3-0.
Remo, gimnasia artística, pentatlón moderno igualmente se encuentran entre las disciplinas que carburaron este viernes y que continuarán con accionar durante sábado y domingo. Confiemos en que al igual que la víspera, donde mujeres y juventud llevaron la batuta, los nuestros se mantengan en la cuerda dorada.