Rusia 2018: La polka del anfitrión en cinco acordes

Rusia 2018: La polka del anfitrión en cinco acordes
Fecha de publicación: 
14 Junio 2018
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Desde el comienzo los anfitriones salieron a buscar el partido, presionando en el medio campo a sus rivales, sin querer adueñarse de la posesión del balón y con destellos de Aleksandr Golovin por el lateral izquierdo, así como Iuri Gazinsky dando salida desde la posición de contención.

Precisamente Gazinsky anidó la primera Telstar-18 en la portería custodiada por Abdullah Almuaiouf, un cabezazo bajo sobre centro de Golovin en tiro de esquina, el primer gol de esta XXI edición de la Copa del Mundo.

En definitiva la formación 4-2-3-1 planteada por Stanislav Cherchesov, con Fedor Smolov como único delantero centro, dio resultado. Al minuto 12 los rusos descompresionaron y luego al 24, la entrada de Denis Cheryshev, jugador del Villarreal español, en sustitución del lesionado Dzagoev, le añadió revoluciones a los contragolpes rusos.

A tal punto que hacia el descanso el propio Cheryshev anidó la segunda diana, convirtiéndose así en el primer jugador de esa nación que se estrena con la selección en Mundiales con par de perforaciones. El zurdo formado en la cantera del Real Madrid, mostró su madera y velocidad y recibió un balón en el borde izquierdo del área que mandó a guardar tras driblar a dos defensas rivales. Cheryshev fue designado por su excelente performance, el jugador del partido.

Los locales fueron al descanso con tranquilidad, comenzaba a echarse la suerte, pero eso no sería todo…

Llegarían otros tres baldes de agua fría para los saudíes: Arten Dyzuba puso el 3-0 en el 71; Cheryshev conseguiría su doblete en el 91 y la sentencia definitiva de tiro libre la colocó con merecimiento total Golovin al 94.

Factores X

1-    Golovin, con más libertad de movimiento en la media cancha, fue una pesadilla para Arabia Saudita.

2-    Las pérdidas saudíes en la medular y la tardanza o dispersión de su zaga en los achiques y marcas, se convirtieron en un auténtico regalo para sus oponentes.

3-    La efectividad y verticalidad de los contragolpes rusos, capaces de disparar en 13 ocasiones a puerta, siete de ellas bajo los tres palos y negociar seis tiros de esquina, lo que da la medida de la profundidad de sus internadas.

4-    La mancuerna y entendimiento de Golovin con Cheryshev y su temible alcance por el carril izquierdo.

Juan Antonio Pizzi, luego de no poder clasificar a Chile, tiene muchas tareas pendientes (especialmente en el sector defensivo) con los halcones verdes del desierto, que pintan a Cenicienta de este grupo A.

Por su parte, Rusia firmó la segunda victoria más abultada de su historia tras el 6-0 que le propinara a Hungría en 1986. Similar ventaja en el marcador les dejó el 6-1 a costa de Camerún en Estados Unidos 1994. Sin embargo en esa ocasión no pasaron de la fase de grupo, cuestión que tienen en un plano muy favorable tras este primer avance.

Esperemos a ver si lo consiguen. Por lo pronto descansan con una diferencia de + 5 goles muy importante en caso de que se produzca un empate en este apartado A, en el que se estrenarán este viernes, Uruguay y Egipto, aunque el plato fuerte de la segunda fecha será el duelo ibérico entre España y Portugal.

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