Una semana de cocina peruana en el Hotel Habana Libre

Una semana de cocina peruana en el Hotel Habana Libre
Fecha de publicación: 
24 Abril 2018
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Directivos del hotel reiteraron este martes que el establecimiento acoge del 24 al 28 de abril un festival gastronómico del Perú con platillos de sus recetas tradicionales.

Esa convocatoria se nombra Aromas, Colores y Sabores del Perú, cocina tradicional, y cuenta como chef de ese país invitado a Alexander Alvarado, quien es cocinero ejecutivo del Meliá Lima.

La cita tiene por escenario el restaurante Sierra Maestra, del piso 25 del hotel mediante una Carta Cena y un Menú de Degustación, en el mismo lugar donde recientemente realizaron los directivos del hotel otro festival gastronómico similar, pero dedicado a la gastronomía de Canaria, España.

El director de alimentos y bebidas del hotel, Giovanni Ríos, comentó que tratan de reflejar mediante estas propuestas una variedad de las posibilidades recreativas del Habana Libre, el más céntrico de los hoteles del país.

Estos encuentros culinarios forman parte de los festejos durante todo el año del Aniversario 60 de abierto el Hotel Habana Libre (19 de marzo pasado), establecimiento con un cosmopolitismo particular, por encontrarse en La Rampa, la calla más concurrida no solo de La Habana, sino de Cuba.

Administrado en sus inicios por la cadena estadounidense Hilton, ahora está bajo la tutela de la española Sol Meliá, y siempre desde 1959 como propiedad cubana.

El Hotel Tryp Habana Libre, inaugurado el 19 de marzo de 1958, marca el paso de una capital cubana moderna, constituyendo la hospedería más céntrica y alta de la ciudad en una punta de La Rampa, la calle más bulliciosa.

Luego de una remodelación capital, cuenta con 572 habitaciones e innumerables servicios de gastronomía, centros nocturnos y salones de reuniones, historia e intimidad especiales.

Después del triunfo de la Revolución Cubana en 1959, su realce fue tal, que en la habitación nombrada La Castellana, el líder Fidel Castro asentó la comandancia de esos primeros tiempos.

La instalación cuenta con habitaciones de cerca de 50 metros cuadrados de superficie, balcón y vista a la ciudad o al mar, y una serie de comodidades propias de un hotel cinco estrellas.

Entre las novedades, se encuentra un mural frontal de la pintora cubana Amelia Peláez y obras en sus salones de los artistas plásticos Alfredo Sosa Bravo y Portocarrero, entre otros.

Esta hospedería de lujo, fue sede de diferentes eventos como competencias internacionales de ajedrez, cenas de gala dedicadas a los habanos o albergar a más de dos mil reporteros de todo el mundo durante la visita del Papa Juan Pablo II a Cuba.

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