Usa-violencia: Testimonio de una «muerta-viva»

Usa-violencia: Testimonio de una «muerta-viva»
Fecha de publicación: 
24 Marzo 2018
0
Imagen principal: 

Y sobre todo cuando la vida queda sostenida por un hilo.

Este viernes, el sitio cnn.com publicó el testimonio de Karina Vargas, sobreviviente de una de sus refriegas en Aurora, Colorado.

Ella integra una colectividad de víctimas de la violencia, denominada Everytown Survivor Network.

Karina, en silla de ruedas, participará este sábado en la masiva protesta de personas de todas las edades «Marcha por nuestras vidas», exigiendo el control de armas, organizada en todo el país.
    
En este recorrido mostrarán que los estadounidenses están hartos de la violencia con armas de fuego que ha afectado comunidades y corta vidas casi a diario.

Karina Vargas, en su testimonio en CNN, expone lo siguiente:

«Esta marcha es personal para mí porque hace casi ocho años recibí un disparo en un tiroteo mientras estaba parada afuera de mi escuela secundaria.

«La bala que permanece alojada en mi espina dorsal me paralizó la mitad inferior del cuerpo.
Tenía 16 años en ese momento y estaba en el penúltimo año en la escuela secundaria Aurora Central.

«Había acabado de terminar mi última clase del día y estaba ansiosa por salir de clases para recibir a mi nueva perrita pastor australiano, Barbie, para mostrársela a todos mis amigos.

«Era tan pequeña, que cabía en el bolsillo frontal de mi suéter.

«Mientras mis amigos y yo pasábamos el rato jugando con la perrita fuera de nuestra escuela, un auto negro hizo de repente un giro en U directo a nosotros.

«Cuando nos dispersamos para quitarnos del camino, recuerdo escuchar el disparo… y luego todo se oscureció.

«Desperté en el piso, con un zumbido en los oídos, incapaz de mover mi cabeza o mi cuerpo.
Solo pude escuchar a mis amigos ir de un lado para el otro, y escuché a alguien gritar mi nombre.

«Sentí a mi perrita temblar en el bolsillo frontal de mi suéter.

«Pero no sentía mis piernas. Mi visión era borrosa. Ahí fue cuando un amigo me levantó, me puso sobre sus hombros y me llevó al hospital.

«Con intervalos de inconsciencia durante el viaje en auto, estaba aterrorizada.

«Le susurraba a mi amigo “voy a morir”.

«Desperté de nuevo en el cuarto de un hospital, con aparatos alrededor de mi cuello y pecho, un tubo de oxígeno en mi nariz y varias intravenosas en mi brazo.

«Después, los médicos me dijeron que probablemente nunca podría volver a caminar.

«No hay un solo momento en el que no desee poder caminar.

«En el juicio, los fiscales entendieron que yo simplemente estuve en el lugar equivocado en el momento equivocado.

«El atacante buscaba dispararle a gente que se cree es de su banda rival, que estaban cerca de donde yo estaba, pero erróneamente me disparó a mí.

«Cuento todo esto para decir que, aunque ya no sea capaz de pararme físicamente por mis propios medios, estoy levantando mi voz porque este país —y específicamente nuestros legisladores— necesitan entender cómo la violencia con armas afecta a personas jóvenes y a sus familias en comunidades de todo el país.

«Muy a menudo vemos titulares sobre eventos trágicos en iglesias, conciertos y escuelas como la mía —como en Charleston, Carolina del Sur; Las Vegas; Parkland, Florida—, o en cualquier lado.

«Pero, eventualmente, las cámaras y reporteros se van y los sobrevivientes como yo debemos seguir.

«Sin embargo, nuestra frustración crece, particularmente mientras vemos tan poca acción de nuestros legisladores locales, estatales y federales.

«Esta vez, creo que la tendencia ha cambiado, gracias, en gran parte, a estudiantes de todo el país que se rehúsan a tener un “no” como respuesta.

«Esos estudiantes están dándole lecciones a los senadores en televisión nacional y haciendo frente al “todopoderoso” y peligroso lobby de armas.

«Ellos están fortaleciendo la reforma de control de armas y haciendo que los poderosos rindan cuentas.

«Este sábado, llevaré un cartel que he estado colgando en la pared de mi cuarto durante seis años.

«Es un recuerdo de las diversas manifestaciones y audiencias a las que he asistido a lo largo de los años, mientras defendía la prevención de la violencia con armas de fuego en Colorado.

«Dice: “Déjennos vivir”».

Añadir nuevo comentario

CAPTCHA
Esta pregunta es para comprobar si usted es un visitante humano y prevenir envíos de spam automatizado.
CAPTCHA de imagen
Introduzca los caracteres mostrados en la imagen.