La tormenta Eleanor azota el norte de Europa

    La mujer murió en la pista tras la caída de un árbol, mientras se cuentan en diversos países decenas de heridos, entre ellos 8 personas tras el descarrilamiento de un vagón de tren en las cercanías de Lenk, en Suiza, uno de los países más afectados por la tormenta Eleonor. El paso de la violenta tempestad, asimismo, causó que se cancelaran vuelos en los aeropuertos de Holanda, Suiza, Francia y Reino Unido, mientras la Torre Eiffel fue cerrada al público a raíz de las ráfagas de vientos de 150 kilómetros por hora.

    La tormenta proveniente del Océano Atlántico ha golpeado especialmente a Francia. Además de la esquiadora que murió en Morillon, en la Alta Saboya, el balance de heridos es de 15 personas, de los cuales cuatro están en estado grave.

    En ese país, asimismo, son 225.000 las casas sin electricidad, mientras los bomberos se vieron obligados a intervenir 4.300 veces. En París, tras el cierre de la Torre Eiffel por precaución, la situación está regresando gradualmente a la normalidad, aunque en 36 departamentos franceses persiste la alerta naranja.

    También el Reino Unido fue golpeado por Eleanor, con vientos superiores a 160 kilómetros por hora mientras fue emitida la alerta de mal tiempo en Irlanda del Norte, Inglaterra y Escocia.

    Al menos cuatro personas, en Inglaterra y en Gales, resultaron heridas por la caída de árboles y se cuentan miles de casas a oscuras en todo el país. Hay también carreteras bloqueadas y puentes cerrados, además de alarmas por inundaciones difundidas en particular en zonas costeras. En Irlanda, la situación no era mejor, a tal punto que el primer ministro Leo Varadkar aseguró el pleno apoyo del gobierno a las familias y a las empresas afectadas por el paso de la tormenta. Mientras, al menos 8 personas resultaron hoy levemente heridas en el descarrilamiento de un vagón de tren en las cercanías de Lenk, en Suiza.

    Según el alcalde René Müller, el accidente fue causado a causa de una violenta ráfaga de viento.

    Los ferrocarriles preveían inconvenientes en la circulación sobre varios tramos. A causa del mal tiempo se suspendió también el servicio de barcos en algunos lagos.

    Hubo además muchas dificultades para el tránsito aéreo.

    En Schiphol, Ámsterdam, fueron cancelados 252 de los 1.200 vuelos programados, mientras para los otros se prevén retrasos de hasta una hora. Las interrupciones y cancelaciones también se produjeron en Suiza, en los aeropuertos de Zurich y Basilea.

    La autopista A1 (este-oeste) estuvo cerrada durante más de dos horas desde Oensingen (Solothurn) en dirección a Berna.

    Las ráfagas hicieron volcar tres camiones y cinco furgonetas, dijo la policía local. La policía de diferentes cantones azotados por la tormenta recibió más de 2000 llamadas telefónicas por árboles y ramas caídas en el suelo o en edificios, andamios dañados y techos abiertos.