Latinoamérica y sus opciones en la Copa del Mundo de Rusia

Deben conjugarse una serie de factores: trabajo en equipo, adaptabilidad rápida a las situaciones de juego, condiciones psíquicas y físicas de los jugadores, incluso la suerte, aunque algunos se muestren reticentes a creer en ella.

Para los equipos latinoamericanos el triunfo se antoja un tanto más difícil si tenemos en cuenta que el evento venidero se desarrollará en Rusia. En el Viejo continente, solo Brasil (Suecia-1958) logró imponerse.

Analicemos las posibilidades de las ocho escuadras procedentes de este lado del Atlántico.

El sorteo deparó para Uruguay un grupo bastante asequible, el A. El anfitrión dista mucho en materia futbolística de aquellas selecciones de la antigua Unión Soviética, mientras Arabia Saudita y Egipto no son rivales complicados, al menos en los papeles.

Oscar Washington Tabárez, el gran estratega, volverá a diseñar un esquema de presión y sacrificio. Delante podrá contar con una dupla goleadora brillante, de lo más temible del planeta, con Luis Suárez y Edison Cavani, acostumbrados a importantes competiciones y definir torneos.

Uruguay no gana desde 1950 cuando protagonizaron los sucesos del Maracanazo en Río de Janeiro.

Perú va más difícul en el apartado C. Francia, uno de los favoritos a priori, luce superior. Australia y Dinamarca tampoco deben ser tareas sencillas, en especial los escandinavos, que pretenden retomar la versión de los 90 del siglo pasado.

Los incaicos deberán esperar por la situación de su delantero estrella, Paolo Guerrero, sancionado por doping. Su última participación mundialista está marcada en España-1982, con una generación liderada por Teófilo Cubillas, su mejor jugador de todos los tiempos.

Las aspiraciones de Costa Rica en el grupo E dependen de una lucha férrea con Suiza y Serbia, pues Brasil se encuentra en otro nivel.

Los helvéticos y los balcánicos trabajarán con planteamientos tácticos de mucha disciplina, aunque los ticos demostraron en el certamen anterior que pueden pasar escollos de selecciones campeonas del mundo.

Para la mayor potencia futbolera de centroamericana, México, el terreno luce un poco más despejado en su camino al segundo cupo en disputa de la llave F.

Alemania reafirmó en la reciente Copa Confederaciones ser un rival de talla superior, empero Suecia y Corea del Sur están al alcance de los aztecas.

El debut de Panamá en estos eventos podría ser anecdótico. Bélgica e Inglaterra comparten el apartado G. El único rival asequible para los canaleros parece Túnez, aunque en estas instancias no existen contrincantes débiles.

Del talento de jugadores como Radamel Falcao, James Rodríguez y Juan Guillermo Cuadrado dependerá el avance de Colombia en el último grupo del evento, en el cual también competirán Polonia, Senegal y Japón, que no debe dar la sorpresa, amén de ser un equipo muy aplicado tácticamente.

La tríada de contrincantes para los colombianos presentan características muy distintas.

Los polacos hicieron un ciclo eliminatorio envidiable, con 25 puntos de 30 posibles. Juego vertical y efectivo, aunque dependiente de Robert Lewandowski, líder anotador de la clasificatoria europea.

Senegal vuelve desde su primera incursión en 2002. La mayoría de sus piezas actúan en la League 1, de Francia, aunque su estrella, Sadio Mané, es figura del Liverpool.

Las principales potencias de nuestro continente, Argentina y Brasil, presentan fuertes candidaturas, pero ambas en situaciones diferentes.

Los de Jorge Sampaoli, cuestionados incluso por el liderazgo de la llave D, tendrán que buscar otra variante a la de Leo Messi, quien en la fase eliminatoria participó en más del 80 por ciento de las ocasiones de gol de la albiceleste.

Podría llamarse el grupo de la muerte. Nigeria que recientemente les derrotó en un amistoso, y la Croacia de Luka Modric e Ivan Rakitic, presumen como serios pretendientes, mientras Islandia no se descarta, pues mandó precisamente a los croatas al repechaje europeo.

Argentina debe pasar si finalmente la actual generación se consolida en busca de un resultado.

Brasil vuelve a salir con la etiqueta de favorito. Su DT, Adenor Leonardo Bacchi, Tite, les ha devuelto la moral.

Esta vez Neymar tiene la compañía de jugadores de élite como Philippe Coutinho, Dani Alves, Marcelo o Gabriel Jesús, entre otros.

Habrá que esperar los cruces eliminatorios de octavos de final. De primera instancia la cuarteta formada por Uruguay, Colombia, Argentina y Brasil luce como la más fuerte para seguir en competencia, aunque el camino latinoamericano a la corona lo marcarán las canchas rusas.

(*) Corresponsal de Prensa Latina en la provincia cubana de Camagüey.