Mundo de danza moderna recuerda a Maurice Bejart

El mundo de la danza moderna recordará mañana el décimo aniversario del deceso del coreógrafo francés Maurice Béjart cuyas creaciones marcaron un punto de inflexión en el arte del ballet y abrieron esta arte a un amplio público.

Sus decenas de obras, que recorrieron innumerables países, fueron concebidas en las distintas etapas que fueron esenciales para su carrera, en particular la que pasó en Bruselas, que consideraba su país de adopción, y en Suiza, donde vivió los últimos veinte años de su vida y fundó la compañía que lleva su nombre.

Referente mundial en el mundo de la danza, la compañía Béjart Ballet Lausana ofrecerá este miércoles y jueves en Tokio sendas galas conmemorativas de la desaparición de su fundador, con las obras "t 'M variations..." y "Béjart fête Maurice".

La compañía está dirigida por el coreógrafo Gil Roman, a quien el propio Béjart designó como su sucesor antes de su muerte y con el que trabajaba desde 1979, tras la llegada del primero al Ballet XXe Siècle, que el segundo había establecido en Bruselas en 1960.

Francia nunca consintió ayuda pública alguna para que Béjart pudiese establecer allí su compañía, lo que le llevó a aceptar la propuesta de trabajar durante 27 años en Bélgica, donde creó varias de sus coreografías más famosas, incluida "Le Sacre du Printemps".

Sin embargo, al cabo de tan largos años de fructífero trabajo, un conflicto con el teatro de La Monnaie de Bruselas, al que le unía un contrato, le llevó a instalarse en Suiza, donde entidades privadas le ofrecen apoyo.

El resultado fue la creación en 1987 de la compañía que denominó con su propio nombre en la ciudad de Lausana, donde residió el resto de su vida.

Todas esas fechas hacen coincidir aniversarios redondos: diez años del deceso de Béjart, diez de la dirección de Roman y treinta de la fundación de la compañía, que a lo largo de este año ha celebrado estas coincidencias con distintas producciones.

La primera es "t 'M variations...", creada por Roman, así como "Bejart fête Maurice", compuesta de extractos de coreografías de éste y puestas en escena por su sucesor; y que se han presentado en varios países, incluida España -en Granada, concretamente- el pasado julio.

En este año de aniversarios, la compañía también ha realizado giras con "La Flûte enchantée", coreografía emblemática de Béjart, en una versión de Roman.

Las conmemoraciones culminarán con el estreno mundial, el 19 de diciembre en Lausana, de "Dixit", un espectáculo que combina el cine, la danza y el teatro, en un homenaje a Béjart en el que se proyectarán imágenes de archivo filmadas en la intimidad de la compañía en 1988.

Esta obra apuesta por una nueva técnica de proyección que permite coreografiar las pantallas de cine en movimiento, sobre las cuales se verán imágenes especialmente realizadas con la compañía.

"Descubriremos a través de ella el resplandor, las dudas, la fascinación de una trayectoria artística fuera de lo común", señala la compañía en una nota explicativa.

Los aportes de Béjart al ballet moderno fueron múltiples y entre otros se le reconoce por la idea de combinar para ciertas creaciones -como "Ballet for Life" (1997)- la música pop con la clásica, y tradiciones occidentales y orientales para otras.

A lo largo de su carrera, Béjart creó más de cuarenta obras mayores que siguen inspirando a la compañía que le sobrevivió y que con 41 bailarines es una de las pocas en el mundo que son capaces de llenar salas de espectáculos con capacidad para varios miles de personas.