Javier Sotomayor: «Orgulloso de representar a mi país»

«Siempre me sentí orgulloso de representar a mi país, al igual que ahora», dijo el cubano recordista mundial Javier Sotomayor en entrevista con el diario español As.

¿Cuántas veces tuvo ofertas para dejar su país?, le preguntó el periodista Josep Margalef, y el único hombre que pasó sobre 2,45 metros con su propio impulso respondió:

«Muchas, pero el caso de los cubanos, a diferencia del resto del mundo, éramos los atletas más acechados y tentados de los doscientos o más países que hay en el mundo en cada una de las competiciones a las que íbamos.

«No creo que ni a un dominicano, ni a un portorriqueño, ni a un francés, le propusiesen que abandonase su país. Yo nunca me dejé convencer ».

El también dueño del tope en sala cubierta (2,43 metros) elogió la entereza de su pueblo, capaz de resistir a más de medio siglo de bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por gobiernos de Estados Unidos.

«Hemos resistido cincuenta y podríamos estar otros cincuenta, pero no creo que Trump vaya a estar mucho tiempo en el poder, seguramente no van a ser más de cuatro», sentenció.

«Hemos vivido como hemos podido. Lo que sí es una lástima es que los pequeños pasos que hizo el presidente Obama ahora, con Trump, vayan marcha atrás», añadió el “Príncipe de las alturas”.

«Entre el pueblo cubano y el pueblo americano no hay ningún tipo de problema, pero las nuevas leyes de Trump van a cortar la posibilidad de que los estadounidenses vayan más a Cuba», recordó el astro, quien no ocultó su orgullo por la longevidad de sus marcas orbitales.

«Si de aquí a septiembre nadie los rompe van a cumplirse 29 años de su vigencia y eso me hace sentir feliz y contento.

Es un orgullo para mí poder levantarme cada día sabiendo que soy e plusmarquista mundial. Aún así, soy consciente... de que algún día alguien va a saltar más que yo», explicó como parte de un diálogo en el que también abordó su condición de ciudadano español.

«Fue por una cuestión práctica de pasaporte aunque le puedo asegurar que si hubiese tenido que renunciar a mi nacionalidad cubana no lo hubiera hecho», puntualizó el “Soto” luego de evocar la conquista del cetro olímpico en Barcelona´92.

«Mi objetivo no era tanto buscar un buen resultado como lograr la medalla de oro. Hubo momentos muy comprometidos para mí, pero, al final, conseguí esa anhelada medalla de oro», precisó.

¿Por qué en Salamanca los 2,45?, quiso saber el informador, y el actual secretario general de la Federación Cubana de Atletismo fue categórico al decir que «por pura coincidencia, pero me sentí muy a gusto saltando allí y lo hice en dos ocasiones.

El destino quiso que fuese allí y no en Londres donde la semana anterior tenía que haberlo intentado porque me sentía más fuerte, físicamente mejor de lo que me sentí en Salamanca, y no fue posible por el mal tiempo y la lluvia.