DE CUBA, SU GENTE: Dónde colocar la decepción

Dónde colocar la decepción
Besaré tus ingles regadas como los huertos mozárabes
Traslúcidas y blancas como la vía láctea
Besaré tu sexo terrible
Oscuro como un signo cuyo nombre no puede decirse sin tartamudear

Tomás Segovia

Algún día escribiré sobre todo lo que he perdido: paraguas, novios, amigas, trabajos… El arte de perder no es difícil. Solo hay que irse adaptando; perder algo todos los días. Aceptar la confusión, la pérdida de incluso esos lugares que tenías pensado visitar algún día. La pérdida de ese amor, ese viejo neón al que aún se le encendían las letras.

Para quién escribo.

Si escribo para mí, por qué lo publico. Si escribo para ustedes, por qué a veces pretendo dialogar conmigo misma. No me hagan caso. No sé distinguir entre besos y raíces. Distinguir lo complicado de lo simple.

Algún día habrá que dejar de intentar decirlo todo. Algún día habrá que callar y dejar que la verdad emerja, si es que puede.

Nada que sea sublime puede en realidad describirse.