25 años: una aventura de amor entre una cubana y un vietnamita (Fotos)

Dicen que en la Tierra tan vasta, si dos personas se encuentran y se enamoran, eso es el destino que Dios trazó.

Más tarde, vinieron a Cuba, se casaron y crearon una familia con dos niñas mezcladas entre América Latina y Asia en Las Tunas. “Al principio, interactuamos con el idioma de Eslovaquia. Pero poco a poco le enseñé nuestro idioma y quizás fue por amor, él aprendió de lo más rápido”, rememoró Xiomara con una sonrisa sincera.

Se mudaron a La Habana hace 7 meses, él es chofer particular y ella es ama de casa, me explica Xiomara mientras ve las fotos colgadas en la pared de su hija mayor, quien ya tiene su propia familia y recientemente se fue a Estados Unidos y de la pequeña que cursa en estos momentos el primer año de la universidad.

En el 2011, ellos fueron a Vietnam en el fin de año Lunar con las dos niñas. Para ellas constituía una visita normal, pero para Chien, fue una reunión familiar muy especial, después de 23 años sin ver a su madre. Al repasar los álbumes de foto, su esposa, quien siempre ha permanecido al lado de Chien, contó con los ojos anegados de lágrimas: “En los pasos más duros de su vida, yo estaba ahí, ayudándole, apoyándole y en ese momento no hubo palabras para expresar ni describir esas emociones vividas en su tierra natal. Su madre lloró como una semana entera porque pensó que él no iba a regresar nunca”.

“Los cubanos son muy sencillos, se ayudan mutuamente sin pedir nada a cambio. Sabes que en estos tiempos donde el dinero tiene mucho valor, la gente es cada vez más interesada, y los valores humanos se pierden. Aquí en esta isla se es feliz aunque quizás no tengas muchas propiedades. Aquí yo me siento afortunado”, confesó este vietnamita cuyo corazón fue robado por una cubana hace 25 años.