Al fin acabó la primera mitad

Todavía con un choque pendiente para la segunda vuelta, al fin terminó la primera mitad de la Serie Nacional de béisbol, que reservó emociones hasta estas jornadas reprogramadas para conocer tanto los ocho clasificados, como el orden en la tabla de posiciones para el momento de escoger los refuerzos.

Sobre esto último, ya comentábamos anteriormente que por la pobre calidad restante, no deben ser tan importantes como en los años más recientes. Para quienes como este servidor siempre hemos estado en contra de reforzar en medio de un mismo campeonato, esto será lo más cercano que veremos de nuestras preferencias, porque salvo muy pocas excepciones, en las nóminas eliminadas aparecen pocos hombres que se vislumbran como potencialmente decisivos para las rondas siguientes.

Habrá otro momento para reforzarse, y ese sí debe ser crucial para definir al campeón, porque serían figuras de mucho más peso para afrontar semifinal y final, igualmente injusto para quienes lo dieron todo para ubicarse primeros, por ejemplo, pues pudieran quedar incluso fuera del podio si no escogen bien, o no le rinden los seleccionados.

En fin, algunos dirán que sigo con la misma letanía, pero para eso se trabaja territorialmente, para hacer equipos nacionales hay otros momentos: el campeonato, supuestamente, corona a la mejor provincia.

De cualquier manera, con los aires que soplan, a lo mejor siguen desangrándose los equipos, y por el mismo mal de fondo, (el calendario completamente disonante con el resto del mundo), tampoco se podrá hacer una especie de Selectiva. ¿Qué sentido tiene, y con qué talento?

Mirando como quedó esta etapa inicial, no son grandes las distancias entre los ocho clasificados, aunque quizás ya nadie pueda bajar a Ciego de las semifinales. El resto de quienes están encima todavía no pueden relajarse, y los de abajo tampoco rendirse, porque de todo puede pasar.

El deseo predominante será que prime la calidad y el buen juego, tanto individual como colectivo, para ver si luego en eventos internacionales cometemos menos errores.