Eleva Cuba supervivencia de niños con distrofias musculares

   En conversación con la AIN, la doctora María del Carmen Machado Lubián, especialista de II Grado en pediatría y Terapia Intensiva pediátrica, dijo que ese método también beneficia a la familia, la cual es capacitada  en las propias instituciones durante la hospitalización de los hijos.

  Allí reciben preparación con el mismo equipo de trabajo para aprender a socorrer al niño, manipular los equipos de ventilación, conocer en qué momento tiene signos de alarma y establecer contactos con el sistema de atención médica, dijo.

   Aclaró la miembro del Grupo Nacional de Pediatría que no todos los infantes pueden ser ventilados en sus hogares, pues deben cumplir las condiciones de la vivienda, su ubicación, el aseguramiento de equipamiento, de material gastable y de medicamentos, además del entrenamiento de la familia, remarcó.

   La especialista del Instituto Nacional de Higiene, Epidemiología y Microbiología precisó que debe existir una coordinación entre el equipo asistencial del hospital y el de Atención Primaria de Salud (APS), y estar auspiciado por el Programa Materno Infantil (PAMI) del municipio y de la provincia.

  Después es que el niño puede pasar a ventilarse en su hogar, subrayó.

   Estos equipos de importación son de fácil manipulación por la familia, y muy amigables, incluso los niños y adolescentes son entrenados y también pueden interactuar con esos medios, recalcó Machado Lubián.
   Tal modalidad ventilatoria prolonga la supervivencia y con mejor calidad, recalcó.

   Actualmente en Cuba hay 26 niños en ventilación, de ellos 10 en sus casas y 16 esperando tener todas las condiciones para atenderse en sus hogares o en locales acondicionados, de forma totalmente gratuita, significó la experta.

    Precisó que se aplica después del primer año de edad y fundamentalmente en pacientes con distrofias musculares progresivas, quienes necesitan el apoyo ventilatorio para mantenerse con vida.

  Estos niños antes morían en el primer año de vida, pero gracias a los cuidados intensivos pediátricos y a los avances en la ventilación mecánica logran vivir mucho más, puntualizó.

   La ventilación domiciliaria es un método seguro y necesario que además de beneficiar la evolución favorable del niño, disminuye los períodos de hospitalización, y  los riesgos por infecciones, dijo.

  Sobre el tema disertó la especialista, quien participa en el VIII Simposio Internacional de Ventilación Mecánica para Expertos de las Islas y el VII Congreso Panamericano e Ibérico de Enfermería Intensiva, que concluyen hoy en el Palacio de Convenciones de La Habana.