Barca-Madrid: Un clásico de dimensiones cósmicas

Barca-Madrid: Un clásico de dimensiones cósmicas
Fecha de publicación: 
21 Marzo 2015
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“Minuto 111. Wembley. Falta. Stoichkov empuja suavemente la pelota. Bakero la para y la pierna derecha de Koeman rompe el balón, la barrera, la red.” [...] “mata los fantasmas del pasado, coloca al Barça en la historia y abre un futuro esplendoroso”.
    Santi Nolla. 21 de mayo de 1992. Barcelona

 

 

Se trata del Dream Team de la década de los 90 del pasado siglo. De Hristo Stoichkov, Ronald Koeman, Romario, Pep Guardiola, Michael Ladroup, Vucevic y compañía… Palabras que describen su primer cetro en una Copa de Europa, actualmente UEFA Champions League.

…Ya no importa que sucederá en la Serie Nacional de Béisbol, al menos no desde que una legión de Piratas ahogó rugidos, ensartó la postemporada y hundió en resignación el Latinoamericano y buena parte de Cuba. Esta vez, desde hace buen tiempo para ser exactos el clásico mueve miradas en cualquier latitud. Varias razones refuerzan mi hipótesis. La primera de ellas elemental:

Es el partido en el cual se enfrentan los dos equipos más populares de la Liga BBVA española, considerada la Liga de las Estrellas. No solamente paraliza la geografía ibérica, sino que supera los 500 millones de espectadores en todo el mundo. Constituye una realidad innegable el hecho de que ambos clubes mueven el mayor número de hinchas. El primer duelo entre ambos se jugó el 13 de mayo de 1902 en las semifinales de la Copa de la Coronación, y lo ganó el Barcelona por 3:1.

Precisamente ese marcador dejavú se antoja el antecedente más cercano de una batalla ente ambos, pues justo en la novena fecha de la Liga, signada entre el 24 y el 26 de octubre pasado, los merengues deleitaron a sus parciales en el Santiago Bernabéu con ese marcador favorable en el pizarrón.

Ahora el morbo de un enésimo cara a cara entre onces antagónicos pasa por la posibilidad de alzarse con el título de la competición. Barcelona reina por un resquicio. Lo avalan 65 puntos producto de 21 éxitos (una decena de visitante), dos empates y cuatro fracasos, 78 goles anotados y 16 permitidos; el Real (64) le acecha, gracias a 21 éxitos (diez fuera de casa también), un abrazo y cinco deslices, con 77-24 en el balance de dianas.

Por si fuera poco, como si de la pugna por el balón de oro se tratase Lionel Messi y Cristiano Ronaldo, dos fenómenos del más universal, con una barrera de calidad que los separa del resto pugnan por ese vocablo que suena como néctar divino en los oíds y botines: pichichi. El rosarino, en ese duelo América-Europa si se quiere, comanda a los artilleros con 32 perforaciones asediado por el ídolo de Portugal (30).

Otra realidad es irrefutable. Ambos elencos pasan por situaciones en su juego diametralmente opuestas. La armada de Luis Enrique —independientemente de estrategias no totalmente certeras—, ha enrumbado su accionar desde comienzos de año, volviéndose un rodillo anotador, con 10 y motor incombustible en estado de gracia, Luis Suárez sacudido de la sequía goleadora en la Liga y Neymar (17 dianas) bailando samba en cualquier costado de la cancha.

Otro tridente soportará el poder de fuego merengue: A Cristiano intentarán hacerle la segunda el correcaminos galés Gareth Bale y el gato Karim Benzemá.

No es un secreto que CR-7 no atraviesa por un momento de lucidez supremo. Su ruptura con la modelo rusa Irina Shayk se ha traducido en turbulencia en su juego, pérdida parcial de su capacidad goleadora y grisáceo panorama en lo anímico. Sin embargo el domingo ante el Levante intentó retornar a su endemoniada condición habitual.

ESPECULACIONES TITULARES

La quietud, miradas incisivas, corazones exaltados y cánticos de Visca Barca y Hala Madrid retumbarán en las más disímiles latitudes. Incluso desde el banquillo tanto Luis Enrique como Anceloti analizarán milimétricamente el estado de cada uno de sus efectivos para una posible alineación titular. Bajo semejante émbolo de presión pudieran salir a la grama del Camp Nou el chileno Claudio Bravo, con Piqué y Bartra en el fondo, mientras Jordi Alba y Dani Alves, custodiarían los laterales.

En el centro del campo Mascherano fungiría como mariscal en la recuperación ante la lesión de Sergio Busquets, Andrés Iniesta como creador, acompañado del croata Rakitic o de Rafinha, se perfilan como las mejores opciones.

Completaría la formación el tridente de mosqueteros que integran  Messi y Neymar en los extremos y Luisito en el medio.
Ancelloti por su parte, podría echar mano de Pepe y Sergio Ramos como coraza en la zaga, además de Carvajal y Marcelo en rol de volantes de contención.

 Isco, Ilarrra y el alemán Toni Kroos suenan en el medio sector, con el objetivo de crear oportunidades a la para nada menos temible BBC, como también se le conoce en el mundo de las gambetas al trío conformado por Bale, Benzemá y Cristiano.

La portería de los blancos se debate entre la experiencia de Casillas y la efectividad de Keylor Navas.

En los respectivos banquillos Bartra, Montoya, Pedrito e Iniesta, por los anfitriones, en tanto los madridistas cuentan con «el Chicharito» Hernández, Jese Rodríguez y el croata Modric.

Así se dibuja el panorama de un clásico, que a lo largo de la historia depara 92 sonrisas para los merengues y 89 para los blaugranas en 229 duelos.

Cierro con una curiosidad: A fines del siglo XIX un grupo de inmigrantes británicos introdujo el fútbol en Riotinto, (Huelva), y otras zonas del país, donde trabajaban en la construcción de ferrocarriles.

Ya inoculado de manera inobjetable en los corazones de millones… solo resta esperar a la tarde dominical, vestir la camiseta del club que goce con su preferencia… comerse las uñas y en definitiva ahogar un grito de gooooolll!!! Al compás de un Visca Barca o Hala Madrid.

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