La Florida-elecciones: Su nazi Rick Scott

Dando la espalda a muchos de sus habitantes, el gobernador-candidato Rick Scott rechaza aproximarse a Cuba.

Según declaró este miércoles en Miami, Obama cometería un “gran error” si decide normalizar esas relaciones.

“Los hermanos Castro constituyen un régimen totalitario y causan violaciones a los derechos humanos”, afirmó con gran ahínco.

Por eso creo –agregó- que debemos estar en contra de los hermanos Castro y “a favor del embargo”.

Torpes palabras. Este año conocidas encuestas demostraron que una clara mayoría de los cubanos allí residentes avalan normalizar los nexos con La Habana.

Días atrás, un editorial del influyente periódico The New York Times llamó a poner fin a ese viejo comportamiento de Washington.

¿Qué dijo? Lo sintetizó desde su titulo: “Tiempo de acabar el embargo a Cuba”, o sea, el bloqueo.

En su texto añadió que una amplia mayoría quiere que los países “vuelvan a tener relaciones diplomáticas, una posición que comparte el electorado norteamericano en general”.

Y en breves días, como alertan expertos, la Asamblea General de la ONU otra vez desaprobará la imposición de este cerco y exigirá finalizarlo.

Empresarios de la Florida han reiterado su interés en establecer transacciones económicas con La Habana.

Analistas que hace días  participaron en una conferencia sobre Cuba en la Universidad de Columbia, Nueva York, apuestan que Obama tomará una decisión al respecto luego de las elecciones parciales del cuatro de noviembre.

Los votantes cubanoamericanos en estas representan casi el 40 por ciento de los electores floridanos.

Entonces, ¿por qué la calculada  ferocidad del señor Rick Scott hacia Cuba?

Debido a que se trata de un genuino representante del  neonazi Tea Party, una sombra del sector  más intolerante y cavernario del Miami de antaño.

Pero sobre Scott hay mucho más.  

El pasado cuatro de septiembre, el candidato demócrata a la Gobernación de la Florida, Charlie Crist, formuló un grave señalamiento contra Scott.

Afirmó que grandes negocios de seguros “ayudan con cientos de miles de dólares” a la campaña por la reelección de este.

Gracias a ello, apuntó el sitio MiamiDiario, Scott autorizó incrementar en 214 dólares el precio de las tasas de pólizas correspondientes a la propiedad familiar.

El cinco de enero de 2011, un periódico tan derechista como El Mundo, lo caracterizó en Madrid.

“No lo conocen”, aseveró el rotativo, fue electo por votos republicanos, “en unas elecciones que pasarán a la historia por su escasa popularidad.”

Después agregó, es un empresario multimillonario que llegó a la política gracias al poco interés que demócratas y republicanos dieron al puesto en litigio.

Cada partido, siguió afirmando El Mundo, llegó dividido a las elecciones, hecho favorable para un hombre “expulsado de su propia empresa por el descontento de sus accionistas”.

Fue en medio de todo ello que surgió Scott, a quien se le apareció en su toma de posesión, y habló, dos veces, el entonces gobernador de la Florida, Jeb Bush.

¿Qué dijo el hermano de George W. Bush sobre Scott?

“Es un conservador instintivo. El no parte del principio de que los gobiernos deben necesariamente, si hay otras soluciones, resolver los problemas de la gente”.

Desde aquellos días el periódico  San Petersburg Times lanzó respecto a Scott una expresión tan significativa como vigente:

A este Gobernador "lo conocemos poco".

Quizás en su primer discurso ya asomó incipientes muestras de lo que sería su comportamiento.
Habló de la necesidad del crecimiento económico de la Florida, y al mismo tiempo de la ausencia de dinero para hacerlo.

Y luego sentenció de cara al futuro: “Hay que tener un pensamiento mágico para esperar que podamos crear prosperidad”.

El 12 de agosto pasado, Diario Las Américas reportó que los maestros de Miami-Dade protestaron contra las disminuciones impuestas a su presupuesto por el Gobernador.

Una dirigente del sector, Karla Hernández, afirmó:

“Desde que comenzó la administración de Scott hubo grandes recortes en la educación”.

Ella también denunció ante unos 700 colegas el caso de quienes en sus filas no han percibido salario.

He ahí, en paños menores, al hombre con cara de nazi que aspira a reelegirse como Gobernador en la Florida.