EN FOTOS: «Levante», nuevos retratos de Fidel

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EN FOTOS: «Levante», nuevos retratos de Fidel

Fecha de publicación:

6 Septiembre 2014

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A sabiendas de que una obra de arte puede cambiar el mundo y con esa audacia por lo imperecedero, la atracción por plasmar aquel momento no cesa con los años. Se empeña en pintar ese instante eterno e inmortal tal como lo vivió. Una foto de Roberto Chile con idéntica impronta lo devuelve hasta aquella escena: la misma gorra entre el pueblo del líder sin reposo. No es un hecho accidental ni casual, sino fruto de la congruencia de intereses. El enigma sencillo del bien y la ternura vuelve a vivir en otros de forma especialmente trascendente.

Como un natural complemento, la fotografía de Chile sirve de base a esta muestra. El deseo por representaciones que parezcan objetivamente reales, se nutre del detallismo en las instantáneas, aunque Marcos Antonio Arias Quián se aferra a pintar su propio Fidel.

Del diálogo intergeneracional entre estos dos artistas, resulta esta propuesta con características comunes a la muestra fotográfica «Fidel es Fidel», inaugurada recientemente en el Memorial José Martí. A pesar de tratarse de distintas manifestaciones artísticas, y de personales reinterpretaciones de una misma figura, se observan puntos de conexión y a la vez de ruptura entre Levante y su matriz genealógica. El placer introducido por la mirada, nos sitúa frente al umbral de un descubrimiento, la fusión irresistible entre dos propuestas.

Levante se distingue por su reinterpretación de las obras. La perspectiva realista es compartida en rasgos generales, aunque la intención por resaltar la individualidad del retratado generó una nueva dimensión donde se combina lo figurativo con abstracto. Existe una mímesis entre el mundo real y el mundo de las ideas. El autor está consciente de que el cuerpo perece, pero las ideas son inmortales como las imágenes. Por eso revistió al retratado con la encarnadura de lo cotidiano para mostrar al Fidel predicador y visionario como un hombre biológico, donde la épica se halla sometida a una perspectiva humanística.

En «Levante» no solo se dibuja al hombre en sí, sino su espiritualidad como legado de una autocomplacencia a través del mundo interior que como botón de muestra valga el ejemplo de un hombre que lo dio todo por salvar la razón, las utopías y la fe. Las obras mismas son un llamado de urgencia a perseguir las huellas, a extender las pisadas de una obra humana que aún continúa trazando el rumbo de la nación.

exposicion fidel
Título: Menos mal que existen
Dimensiones: 1.75 x 89 cm
Técnica: Mixta