La UE como "fortaleza" pone "en peligro" la vida de los refugiados, según Amnistía

En un informe, la organización de defensa de los derechos humanos afirma que "las políticas de la UE en materia de inmigración y sus prácticas de control en las fronteras impiden a los refugiados acceder al procedimiento de asilo en el bloque, y ponen en peligro la vida de todas esas personas, que emprenden viajes cada vez más peligrosos".

Ante la dificultad creciente de llegar a Europa por tierra, los refugiados toman cada vez más rutas marítimas, más peligrosas, en dirección de Grecia y hacia Italia, y centenares de personas mueren cada año, subraya Amnistía.

Durante los seis primeros meses del año, "más de 200 personas" murieron en el Meditarráneo. "Otras cientos están desaparecidas y podrían haber muerto", añade. Desde 2000, Amnistía adelanta la cifra de "al menos 23.000 muertos".

"La responsabilidad sobre la muerte de aquellos que intentan llegar a la UE es colectiva", afirma Amnistía Internacional, que pide a los Estados miembros seguir el ejemplo de Italia, que luego del drama de Lampedusa en octubre de 2013 lanzó la operación de rescate Mare Nostrum.

Según Amnistía, "casi la mitad de las personas que intentan ingresar de manera irregular en el territorio de la UE huyen de situaciones de conflicto en países como Siria, Afganistán, Eritrea o Somalia".

Este informe fue publicado al día siguiente de una reunión de ministros de Interior europeos, de los cuales una mayoría se rehúsa a modificar las reglas de asilo.

Entre 2007 y 2013, la UE destinó más de 1.800 millones de euros para la protección de sus fronteras externas, pero sólo 700 millones para mejorar la situación de los demandantes de asilo y de los refugiados en su territorio, denunció la organización.

Por otra parte, la UE y los Estados miembros ofrecen a los países vecinos, como Turquía, Marruecos y Libia, cooperación y un apoyo financiero para crear una "zona tapón" alrededor de la UE, cuyo objetivo es "bloquear a los inmigrantes y los refugiados antes de que alcancen las fronteras de Europa", denunció Amnistía.

La organización acusa a los países europeos de "cerrar los ojos" sobre las violaciones a los derechos humanos de las que son víctimas.

Los que llegan a las fronteras europeas corren el riesgo de ser rechazadas inmediatamente. Amnistía registra los casos de rechazo sistemático en Bulgaria y Grecia, en donde esta práctica es corriente, en violación del derecho al asilo.

Amnistía también da cuenta de un grave incidente en febrero de 2014 en las costas del enclave español de Ceuta, cuando la policía española disparó con balas de fogueo y gases lacrimógenos contra inmigrantes que llegaban a nado desde Marruecos. Catorce personas murieron y 23 lograron llegar a la orilla para luego ser reenviados hacia el territorio marroquí.