El paso de conga de los Domadores

Cuando hace unos meses se supo la noticia de que Cuba participaría en la IV edición de la Serie Mundial de Boxeo (WSB), enseguida se despertó la expectativa de cómo iba a ser la actuación de nuestros pugilistas en este evento novedoso para Cuba, con una manera distinta de boxear a las que nuestros atletas están adaptados.

Durante su estancia en Cuba durante el mes de agosto del pasado año, el director general de la WSB el francés Karim Bouzidi, afirmó que confiaba en que vería en la final al equipo de la Mayor de las Antillas, y no se equivocó en su vaticinio; luego de seis meses de competencia, la franquicia Domadores de Cuba disputará la final ante los Bakú Fires de Azerbaiyán los venideros días 6 y 7 de junio.

Para los boxeadores cubanos, se suponía que no iba a ser un torneo fácil por la forma de pelear exigida en esta Serie Mundial, visto que el único torneo previo con algunos de los nuevos cambios fue el Campeonato Mundial de la disciplina en Almaty, Kazajastán, tan solo un mes antes del inicio WSB.

Sin embargo, los Domadores han impuesto su sello sobre el ring, y hasta el momento van registrando una excelente actuación en su debut, enfrentando a lo largo del evento a países potencias de este deporte tales como Rusia, Kazajastán, Azerbaiyán, entre otros; pocos días de efectuarse la final de este torneo, repasemos como ha sido el andar victorioso de los Domadores en su debut.

Los primeros asaltos

Cuba inició su trayecto en la WSB el 15 de noviembre ante la escuadra de los Guerreros de México como visitantes, donde se impuso categóricamente en los cinco combates efectuados en tierra azteca.

Este sería el preámbulo de la brillante primera parte que tuvo el equipo cubano, en un grupo que los especialistas catalogaron como “grupo de la muerte”, ya que en el mismo se encontraban además de Cuba y México, Polonia, Rusia, Kazajastán y Azerbaiyán, siendo los tres últimos países grandes potencias en esta disciplina.

En los primeros 30 combates la escuadra cubana ganó 26, manteniéndose invicta en los seis topes efectuados hasta ese momento, con lo cual aseguró su presencia en la etapa de cuartos de final, pero todavía quedaba mucho por pelear y los cubanos querían más, querían terminar invictos y primeros de su grupo, de cara a la etapa final.

Ante los conjuntos más débiles de su grupo, México y Polonia, los Domadores arrasaron con 20 victorias sin reveses, 10 por equipo, pero ante el resto de las escuadras, la historia no fue igual, aunque sí bastante parecida.

Unos golpes bajos

El camino no fue tan fácil para los Domadores; tuvieron que saltar varios obstáculos para lograr mantener el buen paso inicial: suspensiones, derrotas inesperadas y no muy justas, entre otros problemas, en su andar en la Serie Mundial de Boxeo.

Las dos suspensiones del boxeador Robeisy Ramírez en los 52 kilogramos, debido a indisciplinas relacionadas con faltas de entrenamientos, ocasionó una baja significativa en la nómina cubana, la cual tuvo su contraparte en la reincorporación del campeón olímpico Roniel Iglesias, también sancionado meses atrás por actos de indisciplina.

El incidente donde fue herido el púgil Julio César la Cruz, lo cual produjo su separación del equipo por corto tiempo, fue otro de los momentos difíciles de la escuadra cubana, aunque por suerte no tuvo mayores consecuencias.

El abandono del equipo de dos de sus boxeadores titulares, Marcos Forestal en 52 kilogramos y Ramón Luis en la división de 75 kg, fueron otros sucesos negativos por los cuales tuvo que atravesar el equipo cubano.

Las presentaciones en la etapa clasificatoria ante la escuadra de Azerbaiyán fueron las más complicadas para los púgiles cubanos, siendo este equipo el único que logró ganarle cuatros peleas al conjunto cubano, presagio de la final que viviremos dentro de pocos días.

La inesperada e inmerecida derrota de Cuba en su última presentación en la etapa clasificatoria ante el equipo de Rusia, eliminó la esperanza de culminar invictos en esta parte del torneo, lo cual no le restó importancia a la actuación de Cuba en la WSB, sin dudas el mejor equipo de este torneo.

Minutos finales de una larga pelea  

Ya en cuartos de final Cuba paseó el tramo ante su rival de los Estados Unidos, los USA Knockout, y luego ante Rusia en la semifinal, ambos enfrentamientos con pizarra final de 8-2, con sendas barridas frente a ambas escuadras en la Ciudad Deportiva ante el público cubano, siempre presente en cada una de los topes de los Domadores como local.  
Cuba llega al final de este torneo como el conjunto más ganador: 57 victorias ante solo 13 reveses y 13 matches ganados de los 14 celebrados, sin dudas lo mejor de este evento.

El enfrentamiento ante los azeríes no será nada fácil, puesto que este equipo ha sido el único que les ganó cuatro peleas a los cubanos durante la etapa clasificatoria, y logró ganarle cuatro de cinco combates a los kazajos en el último match en Azerbaiyán en busca de la final.

La final del torneo se disputará en casa de los Bakú Fires, lo cual favorecerá a este conjunto, que tendrá que pelear muy bien para derrocar a los cubanos, el mejor equipo de esta Serie Mundial.

Los Domadores salen como favoritos, con seis de sus 10 hombres encabezando el ranking en sus respectivas divisiones, con destaque para bronce mundial Yosbany Veitía en la división 49 kg, máximo ganador del certamen con siete victorias, y Erislandy Savón y Lázaro Álvarez, ambos con 6 triunfos sin derrotas en los 91 kg y 60 kg, respectivamente.

En sus guantes, y en los de los demás, recae la responsabilidad de mantener el paso triunfal de los Domadores en esta IV edición de la Serie Mundial de Boxeo, y poder llevarse el título de este evento en su primera presentación, poniendo una vez más bien alto el nombre del boxeo cubano, de los mejores del mundo.