Fidel eterno: Destaca Milenio Record Guinnes por intentos de asesinato

Un artículo de opinión del diario mexicano Milenio, titulado Fidel eterno, destaca hoy la entrada de líder de la Revolución Cubana en el libro de los record Guinnes, por haber sido víctima de la mayor cantidad de atentados personales.

"Ha sobrevivido a 638 intentos de asesinato, una cifra en verdad espeluznante que no sólo habla de la buena protección que ha recibido siempre. Habla también con mucha elocuencia de la torpeza de sus enemigos", consideró la publicación.

Según el diario, "los modos concebidos por la larga mano del gobierno de Estados Unidos para sacar del camino de la vida a Fidel Castro van de los más sofisticados hasta los más estúpidos, y no se incluye aquí el “comes y te vas” que tanto dañó su estima: pistolas ocultas en cámaras fotográficas o en estilográficas, veneno en el café o en el puro, explosivos en los zapatos, francotiradores y bombas en su pelota de beisbol".

El agente 86 sentiría envidia ante tanta inventiva, ironiza Milenio.

Hace cuatro años, recuerda el artículo, la CIA desclasificó un paquete de unas 700 páginas de documentos que hasta entonces eran secretos. Lo denominaron como “las joyas de la familia”. Se registraba ahí uno de los primeros planes para asesinar a Castro en 1960, valiéndose de un matón de la Mafia, Johnny Roselli.

La idea era de por sí una novela negra de mala factura, que incluía un desenlace en el que Fidel caía lleno de agujeros y chorreando sangre en el curso de una intensa balacera.

La operación, que no debería estar asociada con ninguna oficina del gobierno de Estados Unidos, fue delegada una y otra vez entre un grupo de asesinos a sueldo que no quería verse involucrado en el atentado, hasta que llegó a las manos de Salvatore Giancana, quien decidió que era una tontería tratar de matar a balazos al dirigente de la Revolución Cubana.

Propuso en cambio el uso de píldoras envenenadas, que le serían suministradas en sus alimentos o bebidas. Aun cuando las píldoras fueron elaboradas con eficiencia, los encargados de llevar a la práctica la operación nunca tuvieron el valor para concretarla.

Y así sucedió siempre desde entonces, hasta que, ante tanto fracaso, George W. Bush terminó por confiarle la misión al Creador: “un día el Buen Dios se llevará a Castro”. Fidel, mientras tanto, sigue ahí, feliz de la vida, rumbo a los 86 años.