Diana Fuentes: Cuba me ha hecho fuerte y me ha dado alas

En Puerto Rico tiene lugar por estos días la fase de terminación del fonograma, cuya producción ha estado a cargo de Eduardo Cabra (Visitante), miembro de Calle 13 y esposo de la cantante cubana.

La prensa boricua lo define como carta de presentación internacional de Diana y caracteriza el disco como un compendio ecléctico, en el que convergen ritmos cubanos, pop, electrónica, folk, bolero y otros géneros. «Cada pieza es como un planeta distinto, pues quien lo escucha se traslada a un lugar conocido o desconocido», expresa una de las notas que difundieron en San Juan la primicia.

En declaraciones exclusivas a Granma, Diana explicó el origen del disco:

«Todo despegó desde Cuba, sonó por primera vez desde mi balcón: mi prima nos había prestado un teclado muy pequeñito y mi esposo (Eduardo) y yo decidimos probar hasta dónde podríamos llegar con esa primera idea que nos asaltaba. De ese modo salió una canción, después otra, después otra más, hasta que nos aventuramos a la posibilidad de materializar lo que hoy es Planeta planetario».

Al indagar acerca de cuáles eran los denominadores comunes de la producción, explicó:

«Soy una intérprete que escribe sus canciones, escribo lo que siento, lo que quiero decir y liberar, y las canciones que canto y no escribo, son esas que siento tan mías como si las hubiese hecho yo misma, esa es la pauta común entre el disco anterior, este y todos los que están por venir. Musicalmente, es un disco mucho más rico en la mezcla de géneros, desde el folk, una conga con dancehall jamaiquino, otro tema al estilo de las big band de los años cuarenta... Hay una gran diversidad de estilos que me permitió un desarrollo interpretativo muy interesante al trabajar esta producción».

«En cuanto al bolero, fue una etapa bien linda en mi carrera. Mucho antes de hacer el disco anterior, Amargo pero dulce, grabé un demo de algunas canciones inéditas de mi amigo René Espí y de Ricardo Pérez, quien escribiera maravillosos temas interpretados por el gran Beny Moré, como Qué te hace pensar. Quizás en otro momento retome esa etapa que disfruté muchísimo. Tampoco me siento una trovadora, aunque admiro y adoro al género, a sus intérpretes y compositores».

Diana tuvo una gran escuela durante su estadía en el grupo Síntesis, de Carlos Alfonso. En los últimos años comenzó una carrera en solitario. Acerca de su vínculo con la multinacional Sony, afirmó:

«Es un paso muy importante dentro de mi carrera, la oportunidad de expandir el terreno y explorar nuevos territorios, es un hecho positivo para cualquier persona. El equipo de Sony, presidido por Afo Verde, me ha dado una maravillosa acogida, como un miembro más de la gran familia que es, y ese cariño vale más que todo. Si no tuviese la música, no tendría nada, eso sí marcaría una gran diferencia en mi vida».

Y a continuación, precisó:

«Me encantaría que el disco saliera en Cuba con mi sello discográfico, la EGREM. Estamos trabajando en ello para dejar todo lo mejor compensado posible para ambas partes, pues para mí lo más importante es que mi disco esté en las tiendas de mi país, que el público lo pueda tener. Fue un proceso largo de negociación con Sony para que nos liberasen el territorio cubano: esto significó una gran alegría para todo mi equipo y para mí».

No caben dudas acerca de la identidad de esta joven y talentosa cantante. De manera explícita abordó ese enraizamiento al término de la entrevista:

«Para todo creador, la relación con el medio y el espacio que habitamos es vital. Mi relación con Cuba es infinita, el hecho de que comparta parte de mi tiempo con otra isla, no quiere decir para nada que no la necesite, la procuro todo el tiempo y la extraño cuando estoy lejos. Cuba, como una madre que ama y quiere lo mejor para sus hijos, me ha hecho fuerte y me ha dado alas para lanzarme a la búsqueda de nuevos caminos, siempre con la certeza de que en ella encuentro puertas abiertas y mis verdaderos lugar e identidad».