Preservan en Cuba tradiciones europeas de bordados y tejidos manuales

El proyecto Arte Moda, de la reconocida diseñadora Lourdes Trigo, trabaja en esta ciudad del centro-sur de la Isla por la preservación de bordados y tejidos manuales originarios de Bélgica, España y Francia.

Trigo, merecedora en 2006 del Sello de la Excelencia que otorga la Unesco a los creadores manuales, inició su proyecto hace un año cuando el gobierno de Cienfuegos, 250 kilómetros al sudeste de La Habana, le cedió un local en el Boulevard San Fernando, principal arteria comercial de la ciudad.

Relacionada con el mundo de la moda a partir de 1984, primero como modelo, la ex profesora de Español y Literatura, Trigo comentó a Prensa Latina que ella privilegia en su labor artesanal la salvaguardia de la tradición de manualidades los textiles.

Los diseños únicos que exhibe y comercializa en su atelier incorporan a la moda tejidos y bordados como el crochet, frivolité, miñardí, deshilado, bieses, patas de gallina, barretica, entre otros.

Esas confecciones hechas a mano provienen en lo fundamental de España, Francia y Bélgica y con el avance de la industria textil han ido quedando en el olvido, apunta la creadora a quien le llegaron desde la niñez por tradición familiar.

El proyecto Arte Moda pretende en una primera etapa la orientación, la exposición y la comercialización de la labor que lidera Trigo.

En lo adelante los objetivos apuntan a dar capacitación y perfeccionar las ofertas de la tienda con la incorporación de calzado, orfebrería y bisutería que sigan los mismos cánones de diseño.

Para Lourdes Trigo, galardonada además con el Premio Manos conferido en 2007 por la Asociación Cubana de Artesanos Artistas, la aceptación de su obra por la población constituye el principal reconocimiento.

Un premio lo concede un jurado, pero el hecho de ver a las personas vestidas con lo que yo hago es algo mucho más reconfortante, concluyó la creadora.