Carter: Bofetada a un argentino renegado

Este jueves, una vez más, el periodista norteamericano de origen argentino, Andrés Oppenheimer, atacó a la Revolución bolivariana de Venezuela.

Ahora trató de utilizar la autoridad de un ex presidente de Estados Unidos, James Carter, para consumar las instrucciones que le impartió Washington.

Mencionó una entrevista que le hizo donde “me interesaba muy especialmente saber qué diría sobre la crisis política en Venezuela respecto a las elecciones del 14 de abril.”

Luego el articulista sufrió un primer revés cuando admitió que el Centro Carter, con sede en Atlanta, “ha despertado la furia de los opositores venezolanos” por convalidar  varias elecciones ganadas por Hugo Chávez.

Después Oppenheimer se auto pregunta; ¿qué dirá Carter sobre los comicios venezolanos de abril? ¿le dará algún crédito al candidato opositor Enrique Capriles, quien afirma que le robaron la elección?

Cuando le pregunté –dice el ilustre columnista- si el proceso electoral venezolano fue limpio, Carter afirmó que la votación “fue libre y justa”.

En otra parte de esa entrevista, el ex jefe de la Casa Blanca manifestó a Andrés Oppenheimer: “Venezuela probablemente tiene el sistema de votación más excelente que yo haya conocido”.

Formidable bofetada de James Carter a un argentino renegado a quien formaron como periodista en escuelas de Estados Unidos y hoy figura como uno de sus más fieles propagandistas.

Baste un ejemplo con el ánimo de sintetizar sus entrañas ideológicas y su claro desprecio por los valores latinoamericanos.

Con fecha 16 de noviembre de 2011, en el blog Luis Maran, aparece un comentario titulado Las 15 mejores frases de Andrés Oppenheimer, en el Expomanagement 2011, décima versión en México.

Una de sus curiosas ideas afirma tranquilamente:

“Estamos obsesionados con nuestra historia (…) constantemente estamos desenterrando muertos. No solo metafóricamente, sino de manera literal. En Venezuela se desenterró a Bolivar, en Mexico paseamos los restos de los héroes de la independencia. Nuestra obsesión con el pasado nos impide ver hacia el futuro”.

Argentina, donde nació el autor de esas palabras, tiene a su héroe nacional, José de San Martin, figura venerada por todo latinoamericano decente, a quien algunos, como Oppenheimer, solo conciben tallado en mármol.
 

Hace poco este último recibió una lección de oro impartida por un estadounidense de formación religiosa, de  valores éticos, respetado por los mejores hijos de Estados Unidos: James Carter.