ENTREVISTA: Septeto Santiaguero, cuando la música tradicional suena

El Septeto Santiaguero será una de las agrupaciones invitadas al concierto de celebración del aniversario 49 de la EGREM, este viernes 29.

Precisamente con esta disquera el conjunto licenció su séptima y más reciente producción, Vamos pa´ la fiesta, que inicialmente fue publicada por el sello español Picap.

Además del sabor indiscutible a Santiago, uno de los mejores ingredientes de este álbum es la colaboración de músicos de talla extra a nivel internacional, como Rubén Blades (con quien hicieron una versión especial de Lágrimas negras); Cheo Feliciano; José Alberto, el canario; Jimmy Bosch; Luisito Quintero y Edwin Colón Zayas.

“Se trata de un disco de varios géneros de la música cubana: el changüí, el bolero, el pilón”, comentaron su director Fernando Dewar y Alden González, representante del grupo que tiene18 años.

¿Cómo fue esta experiencia con músicos tan reconocidos mundialmente?

En algún momento coincidimos con algunos de ellos como Jimmy Bosch, durante una edición del festival Tempo Latino en Francia, pero no habíamos trabajado directamente con ninguno; de hecho ellos grabaron desde sus países y nosotros aquí y aún no nos hemos visto personalmente.  

Fue una experiencia muy positiva que nos ha unido y esperamos que sea un camino a nuevas colaboraciones para el Septeto.

 
Después del boom que tuvo la música tradicional cubana con el fenómeno del Buena Vista, ¿cuán interesante o difícil puede ser seguir haciendo música tradicional desde Cuba?

Los booms son algo efímero, pero de este fenómeno sacamos algo positivo y fue que se crearon muchos espacios para la música tradicional; y aunque no todas las agrupaciones siguieron en la palestra, nosotros nos hemos mantenido. Seguimos en Santiago, allá tocamos en el Salón de los Grandes de la Casa de la Trova y en la Casa de la Música.

¿Cuánto puede haber influido en la música que hacen el hecho de que ustedes surgieron en Santiago y ahí se han mantenido?

Es muy importante nuestro lugar de origen porque precisamente la energía de la música que hacemos depende de esa retroalimentación, del contacto directo con la gente de la región oriental, que son los que más sienten el son tradicional.

En medio del auge del reggaetón y otros ritmos foráneos que han ganado lugar en Cuba, ¿crees que la música tradicional sigue en la preferencia?

En Santiago de Cuba sí es así, y de hecho los jóvenes nos siguen mucho desde un espacio que tiene la FEU los jueves en la Casa de la música, ellos son el quórum principal allí.

Y en el extranjero el público es muy joven también. Nosotros nos presentamos en festivales como el Blue Balls y Tempo Latino, cuyos espectadores son la juventud y allí nuestra música tiene muy buena recepción. La mayoría de nuestros seguidores en Facebook y Twitter son jóvenes.

Aunque el nombre  de Septeto suena a lo más tradicional, la música nuestra está llena de contemporaneidad. Todo lo que está sucediendo con el Septeto hoy demuestra lo mucho que se puede hacer con la música tradicional cubana.