Cuba, único equipo del Clásico sin peloteros profesionales ni jugadores importados

Fresca en la memoria, la no clasificación de los cubanos hacia la etapa decisiva del III Clásico Mundial de Béisbol en dramático final 7x6 ante el batallador Holanda, dejó una cierta frustración en el equipo dirigido por Víctor Mesa.

De hecho la escuadra mejoró ligeramente la actuación del Clásico de 2009 aunque se quedó a las puertas de la fase crucial de San Francisco, California, el anhelo de más de 11 millones de habitantes en la Isla y allende los mares.

Todos queríamos por lo menos repetir la hazaña de 2006 (subcampeones), dijo el fornido slugger José Dariel Abreu con la voz entrecortada antes de irrumpir en llanto al añadir: pero no pudimos.

En el plano individual figuras como los veinteañeros José Miguel Fernández (jugador de cuadro), Yasmani Tomás (jardinero) y Raisel Iglesias (lanzador) fueron revelaciones en calidad de debutantes con el primer elenco de Cuba en eventos internacionales.

Entre las estrellas se confirmaron los jonroneros José Dariel Abreu y Alfredo Despaigne, con tres bambinazos cada uno, y el cuarto bate Frederich Cepeda, aunque no siempre fueron efectivos en momentos críticos de algunos cotejos.

Llamó la atención el espíritu colectivo reinante en el conjunto cubano y el intento de juego agresivo propuesto por el mentor Mesa. Su talón de Aquiles, el cuerpo de lanzadores que adoleció de un verdadero líder.

En las estadísticas preliminares del III Clásico, Cuba aparece por encima de los otros 15 planteles participantes en el liderazgo de bateo con promedio de 343, slugging de 577, con 11 jonrones, 12 tubeyes y un triple.

Marcha en tercer escaño en pitcheo, con 2,54, superado únicamente por Corea del Sur (eliminado en la primera etapa) con 2,08 y Puerto Rico, ahora en la segunda vuelta de Miami, con 2,33.

El veterano derecho Danny Betancourt está en el grupo de élite de monticulistas con 0,00 de promedio de carreras limpias permitidas por juego, junto al japonés Kenta Maeda, ambos con 10 innings lanzados.

Juventud en sus filas y talento en cierne en la Serie Nacional que se reanudará en breve, señalan que el único equipo en el III Clásico Mundial sin peloteros profesionales ni jugadores importados, tiene un futuro promisorio en este deporte.